La Rada Suprema (Parlamento) de Ucrania aprobó una enmienda para que las células reproductoras de los hombres y mujeres caídos en combate puedan emplearse para concebir hijos de forma póstuma, en lugar de destruirse como hasta ahora.
"El error ha sido corregido. La destrucción póstuma de los biomateriales militares se ha cancelado", declaró la viceportavoz de la Rada, Olena Kondratiuk, en Telegram.
"Así, a partir de ahora, el estado almacenará de forma gratuita las células reproductivas de los hombres o mujeres del Ejército en los tres años tras su muerte", agregó.
La Rada había iniciado la semana pasada los procedimientos para modificar la ley que impedía a las viudas de los soldados caídos en el frente utilizar su esperma congelado mediante técnicas de reproducción asistida para no quedarse sin descendencia.
A través de redes sociales, con peticiones a las autoridades y en entrevistas en medios locales, varias mujeres ucranianas que perdieron a sus maridos en la guerra habían reclamado a los políticos que tomaran medidas al respecto.
La ley que estas mujeres piden cambiar fue aprobada en noviembre para regular la financiación por parte del Estado de los procedimientos de congelación de material genético y reproducción asistida para los soldados de ambos sexos interesados.
El texto, que está pensado para los militares que pierdan sus capacidades reproductivas por heridas sufridas en el frente, no reconocía sin embargo un derecho a la paternidad después de la muerte de los soldados caídos y una de sus disposiciones, que debía entrar en vigor este mes de marzo, obligaba a destruir el material genético después de la muerte de quien lo congeló.
“Estoy convencida de que cada persona tiene el derecho de decidir por sí misma qué debe hacerse con sus células reproductivas en caso de muerte”, dijo a EFE la semana pasada la diputada Oksana Dmitriyeva, una de las impulsoras de la enmienda.
SNGZ