El presidente Donald Trump confirmó que Estados Unidos no sufrió ninguna baja de militares, tras el ataque con misiles orquestado por Irán contra una base en Irak.
"No hemos sufrido ninguna baja y todos nuestros soldados están seguros, sólo sufrimos daños mínimos", comentó.
En un mensaje en la Casa Blanca, reiteró que Irán "nunca tendrá permitido tener armas nucleares y me da gusto informar al pueblo de Estados Unidos que estoy muy agradecido y contento porque ningún (soldado) fue herido en los ataques de anoche".
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Irán lanzó al menos doce misiles balísticos a dos bases de Irak, donde hay tropas estadunidenses estacionadas, así lo informó el Pentágono.
Los cohetes cayeron la noche del martes en la base aérea de Ain al-Assad, en el desértico oeste de Irak, donde están desplegadas tropas estadunidenses, informó una fuente.
El ataque ocurre días después de las amenazas de Irán tras la muerte del general Qassem Soleimani.