Los gobernadores de Washington y Minnesota promulgaron el jueves protecciones jurídicas para personas que viajen a esas entidades buscando procedimientos reproductivos e intervenciones de reasignación física de género.
Son los últimos estados en promulgar salvaguardas contra las prohibiciones o límites en torno a la atención médica para las personas transgénero y los procedimientos para la interrupción al embarazo que se han implementado en estados gobernados por republicanos.
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En Seattle, el gobernador demócrata Jay Inslee portó una corbata rosa en el evento para promulgar el proyecto de ley que prohíbe que otros estados utilicen los tribunales estatales o procesos jurídicos de Washington para hacer cumplir sus prohibiciones sobre el aborto y la atención sanitaria de afirmación de género.
La ley bloquea las órdenes judiciales, citaciones, solicitudes de extradición y órdenes judiciales de otros estados relacionadas con esos pacientes de fuera del estado.
“La libertad de elección es una cuestión sanitaria. Estamos protegiendo el acceso a la atención médica”, dijo Inslee.
En el otro extremo del país, el gobernador Tim Walz, también demócrata, convirtió a Minnesota en un refugio para los jóvenes que vienen de otros estados en busca de intervenciones de reasignación física de género.
Muchos otros estados se están apresurando a imponer restricciones a la atención médica para las personas en transición. El gobernador también promulgó el jueves una ley que convierte a Minnesota en un santuario para los pacientes de otros estados que quieran abortar y prohíbe la llamada terapia de conversión para los jóvenes LGBTQ+.
La ley de Washington responde a estados como el vecino Idaho, que han prohibido los abortos e ilegalizado que un adulto ayude a una menor a abortar sin el consentimiento de un padre o tutor.
A partir del año que viene, cualquier persona de Idaho que preste atención médica de reafirmación de género a jóvenes transexuales podría ser condenada por un delito grave, después de que el gobernador republicano del estado promulgara una ley que prohíbe el tratamiento a principios de este mes.
Del mismo modo, la nueva ley de Minnesota se dirige a las pacientes que deseen abortar y que vengan no sólo de los estados vecinos, sino de lugares tan lejanos como Texas.