Uno de los cinco yaguaretés registrados en la provincia argentina Formosa fue asesinado por cazadores furtivos, quienes ahora son buscados por la justicia de ese país.
El Ministerio de Producción y Ambiente identificó a los responsables del asesinato de un animal considerado monumento natural provincial, por las fotos que se tomaron con el cadáver, al que quitaron la piel para venderla en el mercado negro.
Según el ministerio, se procedió con la detención de los cazadores. Sin embargo, no especificó a cuántos de los hombres que aparecen en las fotos fueron arrestados, pero el diario La Nación reportó que se aseguró a uno de ellos y se realizaron dos cateos en domicilios.
Los responsables de la muerte de uno de los 250 yaguaretés (una especie de leopardo) que hay en Argentina podrían enfrentar penas de entre dos y cinco años de prisión, con posibilidad de cumplir la pena en arresto domiciliario.
El asesinato se registró la semana pasada en el norte de la localidad Estanislao del Campo, a juzgar por las fotos de los cazadores. La policía descartó que se trate de una red de caza ilegal.
Aún así, la pérdida de uno de los cinco especímenes de los que se tenía registro en Formosa conmocionó a los especialistas, quienes identificaron al yaguareté asesinado gracias a las manchas de su piel.
Resulta que el animal se había dejado ver en dos ocasiones durante el 2024, en febrero y en abril. Era uno de los dos machos de los que se tenía registro en Formosa.
El Ministerio de Producción y Ambiente precisó que aún quedan 160 yaguaretés en la selva de Yungas, así como otros 80 en la selva Paranaense, como reporta El Clarín.
SNGZ