El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, compareció esta tarde de forma telemática en el Congreso de los Diputados de España y pidió que continúe la ayuda con armas y haya más sanciones “contundentes” a Rusia, en lo que fue en un paso más de su campaña para recabar apoyos a favor de su país frente a la invasión rusa, que cumple su sexta semana.
Como hace en sus intervenciones ante parlamentos internacionales, el presidente ucraniano hizo un símil de la guerra declarada por Vladimir Putin al referirse al bombardeo de Guernica en 1937, en el País Vasco, que recordó que fue cuando “el mundo entero” se enteró de la guerra civil española.
“Estamos en abril de 2022, pero parece que estamos en abril de 1937, cuando el mundo se enteró de (el ataque) a vuestra ciudad, Guernica. Imaginen que, en las ciudades normales, donde viven mas de 100 mil personas están sin agua ni medicamentos”, expresó Zelenski, en su intervención que no llegó a los 15 minutos, sobre la situación que atraviesan algunos lugares de Ucrania desde el pasado 24 de febrero, cuando comenzó la invasión rusa.
El presidente de Ucrania aseguró que, "Rusia no busca la paz", por lo que pidió que las sanciones contra Moscú sean "más contundentes" y que "nos ayuden con armas".
“¿Cómo podemos permitir que los bancos generen beneficios mientras ellos están torturando a gente civil?”, se preguntó.
En el caso de España, agradeció el apoyo de la sociedad y se dirigió directamente a algunas compañías españolas para que dejen de hacer negocios con Rusia.
“La gente muerta está siendo enterrada en los patios en que vivían, están escondiéndose los niños”, expresó el presidente ucraniano, para quien lo peor es no saber “cuánto puede durar la guerra”. Por eso pidió que “el mundo haga todo por la paz”.
En su réplica, en nombre del gobierno, el presidente de España, Pedro Sánchez, calificó de “sobrecogedor” el testimonio de Zelenski.
“Atrocidades como las de Mariúpol y Bucha estos días (...) son crímenes de guerra que no pueden quedar impunes”, señaló Sánchez. “El suyo es un ejemplo de dignidad y de resistencia frente al gobierno de Putin”, aseveró.
“España condena con la mayor determinación esta guerra despiadada de Putin contra Ucrania”, afirmó Sánchez, quien, entre otras cosas, se comprometió a imponer más sanciones a Rusia, a recibir a más refugiados, y enviar más armas a Ucrania.
Fue un acto breve, de apenas media hora, aunque con la solemnidad que la circunstancias lo ameritaban. Esto debido especialmente a motivos de seguridad del líder ucraniano y a las dificultades de conexión. Minutos antes, Zelenski intervino, también telemáticamente, en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
La iniciativa de que Zelenski hablará en el Congreso de España partió de todos los grupos parlamentarios que, a principios de marzo, cuando la guerra vivía sus peores momentos, hicieron llegar a Meritxell Batet, presidenta del Congreso español, un escrito pidiéndole impulsar “las gestiones pertinentes” con el fin de que Zelenski pudiera intervenir “a través de videoconferencia” ante el Pleno de la Cámara Baja.
El pasado 15 de marzo, la presidenta del Congreso remitió una carta a Zelenski en la que le invitaba a comparecer en el Congreso y en la que le transmitía su reconocimiento y admiración por “la decidida lucha de los ciudadanos ucranianos en la defensa de su libertad y soberanía” ante la “agresión militar e injustificada” de Rusia contra Ucrania.
Desde que el 1 de marzo instó a la Eurocámara a que ayudara a Ucrania permitiendo su anexión, Zelenski ha ofrecido su discurso por videoconferencia a los parlamentarios de más de una decena de países, entre los que se encuentran Reino Unido, Canadá, Estados Unidos, Alemania, Israel, Italia, Japón, Francia, Suecia, Dinamarca, Noruega, Australia y Países Bajos.
LG