La propuesta de Ley General de Aguas en México identifica cuatro principales problemas de este recurso en el país: cobertura, calidad, uso y desperdicio; para atender estas problemáticas, el presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento de la Cámara de Diputados, Rubén Muñoz, propuso crear un mercado secundario de aguas residuales para la construcción de casas promovidas por el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
Durante su participación en MILENIO Foros Aproximaciones y retos para la vivienda social en México, el legislador señaló que actualmente hay mil 530 plantas de agua residual fuera de operación que están contaminando las aguas superficiales del país.
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“México trae una metástasis hídrica, tenemos un problema de cobertura, calidad, usos y desperdicios. Somos un país que no le cobra a los que contaminan el agua, si hubiera un campeonato internacional de América Latina de ver qué país es el que más contamina sus fuentes de agua, México sería lamentablemente medalla de oro”, mencionó.
El titular de la Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento también aseguró que es indispensable un plan hídrico transexenal que priorice el derecho humano al agua, establezca un nuevo sistema de competencias y garantice más presupuesto para infraestructura.
“Tenemos que pensar a largo plazo, no podemos estar inventando al país cada seis años, México requiere un Plan Hídrico 2023-2050, porque vamos a seguir creciendo como nación y queremos que no le falte el agua, ni al campo, ni a la industria, pero garantizar que cada mexicano tenga el agua que por derecho le corresponde”, subrayó.
Además, detalló que, de los 2 mil 446 municipios que hay en México, solamente 20 funcionan con números negros, es decir, 99.2 por ciento de los organismos operadores está quebrado financieramente, esto se suma a que en promedio se pierde 47 por ciento del agua potable a nivel nacional por fugas, lo cual agrava la situación de desabasto en el norte y centro del país. Por ello, dijo que es indispensable un Sistema Nacional de micro medición de agua para atender el desperdicio, así como monitorear y verificar que “los que más usan agua, paguen más”.
“En el país anualmente se dejan de cobrar 155 mil millones de pesos por concepto de agua potable, agua residual y monitoreo en la calidad del agua del país. Para utilizar estos recursos de manera favorable tenemos que poner un micromedidor a cada concesión de agua que hay en el país, tenemos que acabar con el huachicoleo del agua”, destacó.
AMP