El sexo en una relación de pareja es importante, nos ayuda a conectarnos emocionalmente y a evolucionar en la relación; pero la presión social puede hacernos pensar que es lo más importante de vivir en pareja y nos hace sentir inseguros si la frecuencia con la que tenemos relaciones es baja.
Cada pareja tiene sus propios ritmos y hábitos, pero en general, los sexólogos opinan que la frecuencia con la que se tiene sexo varía de acuerdo a la etapa en la que se encuentra la relación, la edad de ambos, los años que llevan juntos y el momento particular por el que estén pasando.
- Te recomendamos Que tus hijos no interrumpan tu vida sexual Mujeres
Así que en la etapa inicial, cuando todo es excitante y nuevo, se producen oxitocina y testosterona que hacen que la pasión se eleve y busquemos relaciones sexuales más intensas y con más frecuencia. Cuando la relación avanza, el romance gana terreno y la atracción está presente, pero ya sin la urgencia inicial.
Al llegar a la etapa de compromiso, la vida en pareja se siente cómoda y hay confianza mutua, así que entran en acción la oxitocina y la vasopresina, que tienen un efecto calmante. Pero esto no es necesariamente malo.
En sexología, la Ley de Fisher describe la capacidad de adaptación de las parejas, y básicamente se trata de que entre más relaciones sexuales tengas, más te pedirá tu cuerpo, y en el caso contrario, entre menos sexo tengas, menos necesitarás.
Como ves, no se trata de una cuota fija que cubrir, es mejor evaluar que tu relación de pareja te satisfaga en el nivel sexual y emocional, que lo platiques con tu pareja y avancen juntos en su proyecto de vida.
JCH