La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, afirmó en su intervención en el Foro Económico de Davos que, tras un difícil año marcado por la pandemia del coronavirus, “en 2021 la vacuna será la política económica más eficaz” y defendió que “todas las crisis suponen también grandes oportunidades”.
En su participación en la mesa para analizar la situación del sistema financiero frente a la crisis, Botín reconoció que Europa “sufrió mucho” el pasado año, especialmente los países del sur de la región.
Ante la perspectiva del inicio de la recuperación en los próximos meses, la presidenta del Santander dejó claro que “mi visión para 2021 es de incertidumbre”. Sin embargo, se mostró confiada en la capacidad de los países para dejar atrás lo peor de la pandemia, especialmente por los progresos realizados en los últimos meses de forma conjunta en la Unión Europea. “Cuando hay una crisis, Europa progresa”, dijo.
Su mensaje sobre la importancia de que gobiernos y bancos centrales sigan trabajando al unísono para paliar los efectos de la crisis fue contundente. “Nunca habíamos visto programas tan abultados en la Unión, por valor de 750 mil millones de euros”, señaló respecto al programa de fondos Next Generation. Unos fondos cuyo uso eficiente es, a su juicio, “el gran reto para la Unión”.
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Además, explicó que, para el éxito en la implementación de esos fondos, los países necesitan reformas para avanzar en digitalización y transformación energética.
Botín insistió en que “todas las grandes crisis suponen también grandes oportunidades”. Al respecto, recordó que, a diferencia de 2008, el sector financiero es parte de la solución, destacando los enormes volúmenes de financiación diaria que los bancos han concedido a familias y empresas durante la crisis. En el caso de Santander, lo cifró en mil millones diarios.
“Se está haciendo muy buen trabajo, pero necesitamos repensar cómo logrará el sistema financiero seguir apoyando los depósitos, la economía... especialmente en Europa donde los bancos financian sobre todo a pequeñas y medianas empresas, sectores más vulnerables a la crisis”.
Por otro lado, consideró que la digitalización representa una “enorme oportunidad” para el sector financiero, aunque subrayó la importancia de establecer un terreno de juego nivelado para competir con los nuevos actores para lo que ha reclamado una solución ordenada y rápida, incluyendo la cooperación internacional.
“Creo que la digitalización representa una oportunidad enorme para crecer, reforzar el sistema financiero, llegar a más personas, aumentar la inclusión financiera”, expresó la banquera española.
No obstante, Ana Botín subrayó la necesidad de establecer “un terreno de juego nivelado” respecto de las fintech en áreas clave como los datos, las infraestructuras críticas y la innovación, subrayando que, si los bancos deben compartir sus datos de pago para cumplir la legislación, entonces los demás actores también deberían abrir sus datos porque estos “son cruciales para competir en la economía digital”.
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