Las aerolíneas dejarán atrás las pérdidas causadas por la pandemia de covid-19 y se espera que ganen este año 9 mil 800 millones de dólares, más del doble de la previsión de 4 mil 700 millones de finales de 2022, estimó el director general de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), Willie Walsh.
Esto supone, no obstante, que ganarán en promedio 2.5 dólares por pasajero, de acuerdo con Walsh, para quien "claramente ese nivel de rentabilidad no es sostenible, pero teniendo en cuenta que en 2020 las aerolíneas perdieron 76 dólares por pasajero, la velocidad de la recuperación es fuerte".
Por ello, "reparar los balances dañados y proporcionar a los inversores rendimientos sostenibles de su capital seguirá siendo un desafío para muchas aerolíneas”, ha apuntado.
En su intervención en la inauguración de la 79 asamblea general de la IATA, que se reúne entre hoy y mañana en Estambul, Walsh ha dicho que se calcula que los ingresos del sector alcancen los 803 mil millones de dólares, un aumento del 9.7 por ciento respecto a 2022 y 4.1 por ciento menos que en 2019.
La IATA, además, estima que unos 4 mil 350 millones de personas viajen en 2023, cifra que se acerca a los 4 mil 540 millones que pasajeros de antes de la pandemia en 2019, y se operen 34.4 millones de vuelos, 24.4 por ciento más que en 2022 y 11.5 por ciento menos que en 2019.
Aunque la IATA prevé que la industria global de las aerolíneas vuelva a ser rentable en 2023, también espera que no todas las regiones logren ganancias este año, como ocurrirá con Asia-Pacífico, Latinoamérica y África.
En América del Norte, donde se pronostica que la demanda de pasajeros aéreos supere este año en 2 por ciento su nivel anterior a la pandemia y con 5 por ciento de capacidad ofertada más, se espera que las aerolíneas ganen 11 mil 500 millones de dólares en el conjunto de la región.
A pesar de las diversas limitaciones de capacidad experimentadas durante el período de verano, las aerolíneas europeas pudieron volver a obtener ganancias en 2022, rentabilidad que se fortalecerá aún más este año, con 5 mil 100 millones de dólares, con aún 6 por ciento menos de pasajeros que en 2019 y 2 por ciento menos de capacidad.
Los riesgos regionales clave se relacionan con la guerra en Ucrania, los conflictos laborales y las preocupaciones sobre el desempeño económico en algunos países.
En Oriente Medio, que ganarán este año 2 mil millones de dólares, la vuelta a la rentabilidad estuvo en 2022 respaldada por un aumento significativo de 25 puntos porcentuales en la ocupación, superando las otras regiones.
En cambio, las de regiones como Asia-Pacífico, Latinoamérica y África aún finalizarán el año en números rojos, aunque recortando sus pérdidas respecto a 2022, de acuerdo con las estimaciones de la asociación.
En concreto, en Latinoamérica, se prevé que las aerolíneas en su conjunto pierdan mil 400 millones de dólares -a pesar de unas sólidas ganancias de algunas-, con una demanda 2 por ciento inferior a la prepandemia y un oferta 1 por ciento por debajo de la de 2019.
Los volúmenes de pasajeros se están recuperando rápidamente, un entorno económico desafiante en varios países de la región está frenando el ritmo de la recuperación, de acuerdo con la IATA.
África sigue siendo un mercado difícil por desafíos económicos, de infraestructura y de conectividad, a pesar de los cuales, todavía existe una sólida demanda de viajes aéreos, lo que sustenta el movimiento continuo hacia el retorno a la rentabilidad general de la industria.
AMP