Estados Unidos mantendrá aranceles a productos de Europa en medio de
una disputa comercial que data de octubre de 2004 por los subsidios a los fabricantes de aviones europeos Airbus y el estadunidense Boeing; sin embargo, con modificaciones a la lista de artículos gravados.
La Organización Mundial del Comercio (OMC) autorizó en 2019 a Washington a imponer estos aranceles a cerca de 7 mil 500 millones de dólares de bienes y servicios europeos importados cada año, la sanción más severa jamás avalada por el organismo.
Desde entonces, Washington ha impuesto aranceles de hasta 25 por ciento a ciertas importaciones de la UE, como vino, queso y aceitunas, en tanto el gravamen de 10 por ciento a los aviones Airbus se elevaron en marzo a 15 por ciento.
Washington decidió mantener es la cantidad de bienes y servicios afectados en 7 mil 500 millones de dólares, pero manteniendo los aranceles de 15 por ciento para la aeronáutica y de 25 por ciento para el resto, incluidos los vinos franceses, alemanes, españoles y los whiskies británicos.
Sin embargo, la lista de productos afectados se modificó, con el retiro a partir del 1 de septiembre de determinados productos de Grecia y Reino Unido, agregando una cantidad equivalente de productos de Francia y Alemania.
En julio, Airbus anunció que había "cumplido plenamente" las normas de la OMC tras acordar con los gobiernos español y francés pagar mayores intereses sobre los anticipos reembolsables realizados por París y Madrid.
La UE dijo entonces que esta propuesta debería llevar a Estados Unidos a levantar "inmediatamente" sus represalias comerciales decididas sobre la base de este conflicto.
Pero Washington consideró insuficientes las acciones tomadas por la UE, aunque se mostró abierto a la búsqueda de una solución.
MRA