Esta semana se presentaran nuevos vehículos eléctricos en el prestigioso salón del automóvil de Detroit, no obstante la edición 2023 podría verse ensombrecida por duras negociaciones laborales que podrían llegar a una huelga en los grandes fabricantes.
La apertura al público está prevista para el sábado luego de las sesiones reservadas a medios y profesionales del sector.
Pero este año, el salón que se usa como una plataforma para los productos de las automotrices llamadas los "tres grandes" de Detroit -General Motors, Ford y Stellantis- se desarrolla en un contexto difícil.
Debido a que las tres firmas negocian desde hace meses con el sindicato United Auto Workers (UAW) y su nuevo presidente, Shawn Fain, sobre los nuevos convenios colectivos con una fecha límite, el jueves.
"Las negociaciones sindicales están en mente de todos", declaró Alan Amici, presidente del Centro para la Investigación Automotriz, una ONG estadunidense.
Las empresas y los trabajadores han intercambiado propuestas y contrapropuestas, Fain ha sido el encargado de dar cuenta públicamente del descontento.
"Si llegamos a las 23H55 del jueves sin un acuerdo con ninguno de los tres grandes fabricantes, habrá una huelga en las tres empresas de ser necesario", enfatizó el dirigente.
Fain comprende las solicitudes de los empleados, los cuales merecen el mismo 40 por ciento de aumento salarial otorgado a los directivos de los fabricantes. Sin embargo las propuestas de las empresas se quedan cortas ante lo que se pide.
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El sindicato representa a unos 150 mil empleados de los tres grupos. De esa cifra, 97 por ciento dio su consentimiento de principio para una huelga.
La edición 2022 del Salón del Automóvil de Detroit no tuvo presencia de grandes fabricantes extranjeros como Toyota o Volkswagen, ya que esta se llevaba a cabo en enero, y que tuvo que cambiarse el año pasado para permitir mayor afluencia de público.
Se acerca la fecha limite
Este año, uno de los eventos más esperados es la presentación del martes de la nueva versión de la pick up Ford F150 -el vehículo más vendido en Estados Unidos-. El miércoles GM y Stellantis (Fiat, Chrysler) previeron asimismo presentaciones para la prensa.
El sindicato podría estar muy presente en las proximidades del salón al acercarse el jueves.
Ford fue el primero de las automotrices en hacer una contrapropuesta al UAW, de 9 por ciento de ajuste durante los cuatro años de duración del convenio colectivo, y una prima por única vez de 6 por ciento.
El presidente el sindicato consideró la oferta como "un insulto al valor" de los empleados. Asimismo, rechazó "la propuesta insultante" de General Motors.
Stellantis presentó su oferta el viernes: un aumento en los salarios de 14.5 por ciento, una prima única de 6 mil dólares durante el primer año del convenio y 4 mil 500 dólares en los tres años siguientes.
"Es un avance", declaro Fain ante la propuesta. Esto es porque "ponemos presión", afirmó el antiguo electricista de Stellantis, sin embargo, considera que los números continúan siendo "profundamente inadecuados".
"No compensan la inflación. No compensan las décadas de caída de salarios. No reflejan los beneficios muy importantes que generamos para esta empresa", añadió.
Ante las declaraciones, muchos analistas esperan una huelga, a priori en una sola empresa, como ocurrió en 2019, en General Motors, durante seis semanas.
La huelga podría tener un impacto directo en los proveedores, que a su vez recortarían efectivos.
PNMO