Hay una probabilidad del 60 por ciento de que ocurra una recesión moderada que afecte México, explicó Alejandro Stieglitz, vicepresidente senior sales executive en Franklin Templeton Investments.
Se pronostica que esto ocurrirá en el tercer trimestre del año y uno de los principales indicios de que sucederá es el repunte de la fuerza laboral disponible, debido a que mucha gente vuelve a buscar empleos después de la pandemia.
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“Hablando de la oferta laboral, ya está en niveles pre pandemia, por lo que puede haber más personas que estén dispuestas a trabajar, y eso obviamente podría generar una tasa de desempleo un poco más alta”, dijo Alejandro Stieglitz.
Stieglitz comentó que actualmente la tasa de desempleo permanece en niveles bastante bajos; sin embargo, con la vuelta de personas al mercado laboral, ésta subirá durante el segundo semestre del año.
“El empleo es una de las variables que no se ha deteriorado en los últimos meses y que va a ser clave para ver una posible recesión; creemos que una vez que se empiece a deteriorar el empleo será de una manera rápida y esto podría causar que la recesión llegue de manera aún más rápida”. detalló el vicepresidente de Franklin Templeton en México y Centroamérica.
Otra variable a considerar es el consumo, que aún mantiene resiliencia de acuerdo con la firma de investigación Franklin Templeton, pero se espera que esta también se deteriore en el tercer trimestre del 2023.
La adquisición de bienes se mantiene al alza, habiendo ya superado los números del 2019, sin embargo, el gasto de las personas en servicios se mantuvo debajo de las cifras pre-pandemia y sostiene una tendencia a la baja.
Además se mantiene la salida de depósitos de los bancos, debido a la crisis bancaria que enfrentó Estados Unidos hace unos meses; Stieglitz resalta que que aun no es sistemática, pero si los bancos no lidian con ella adecuadamente puede ser problemática en un futuro.
“Los bancos necesitan los depósitos para prestarlos al público en general, pero si se empiezan a quedar sin depósitos el crédito se va a ralentizar y las condiciones de los mismos se vuelven menos favorables”, aclaró Stieglitz.
Esto afecta a las pymes, pues hace que tengan problemas encontrando financiamientos.
A su vez, este credit crunch podría golpear directamente a las compañías que ya tengan endeudamientos, así como a aquellas que se encuentran en crecimiento, explicó el Vicepresidente de Franklin Templeton en México y Centroamérica.
Sumado a esto, los empleos se verán afectados, pues si bien actualmente la tasa de desempleo permanece alta, el regreso de las personas a trabajar sumado a la falta de recursos de las pequeñas empresas limitará las posibilidades de encontrar trabajo para las personas de entre 25 y 54 años.
De acuerdo con datos de Clearbridge, 95 por ciento de los empleos disponibles son proporcionados por las pymes, mismas que tendrán que reducir sus contrataciones debido a los endurecimientos de los bancos para otorgar créditos.
Pese a la recesión se espera que Banxico, se mantenga en línea con la Reserva Federal de Estados Unidos y mantenga tasas restrictivas al menos dos años más, pues si bien esto no incentiva el crecimiento, en estos momentos la prioridad es limitar la inflación.
Alejandro Stieglitz destacó que la tasa llegará hasta el 11.5 por ciento y se estabilizará en esa cifra durante el resto del año, y si bien puede reducirse en 2024 se mantendrá por arriba del 7 por ciento.
AMP