Ante el incremento de vehículos pesados usados que se registró en noviembre, con mil 329 unidades, que representó un avance de 27.9 por ciento, comparado con el mismo mes del año pasado, la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) hizo un llamado para revisar el marco legal y actualizar el decreto de importación de vehículos usados.
Miguel Elizalde, presidente de la ANPACT, hizo un llamado a la Secretaría de Economía para que en los siguientes días actualice el decreto de importación de vehículos usados, a que SEMARNAT actualice el acuerdo ambiental y que la Comisión Reguladora de Energía inicie el grupo de trabajo de la norma de calidad de petrolíferos para revisar en momento se tendrá disponibilidad de diésel de ultra bajo azufre en todo el territorio nacional.
Guillermo Rosales, director general adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), refirió que el decreto para la importación de vehículos pesados usados vencerá el próximo 31 de diciembre y estimó que se mantendrán las condiciones regulatorias que han dado cierto orden a la entrada al país de estos vehículos.
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De acuerdo con cifras del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en noviembre la importación de tractocamiones usados fue de 839 unidades que, comparadas con las 727 unidades del mismo mes de 2019, representan un 15.4 por ciento de incremento. Estas cifras reflejan que se importaron 72 tractocamiones usados adicionales por cada 100 tractocamiones nuevos vendidos al menudeo.
El crecimiento más importante en noviembre se observó en la importación de unidades usadas de autobuses, se incrementó 92.1 por ciento respecto al mismo mes del año 2019, se importaron 315 unidades, 151 unidades más que el mismo mes de 2019.
Destaca que es el quinto mes en el que la importación de autobuses urbanos usados es igual o mayor a las ventas de autobuses nuevos, lo que impacta doblemente la renovación de la flota y a los concesionarios de transporte que están enfrentando una caída de alrededor del 50 por ciento del aforo, sostuvo Miguel Elizalde.
“México no debería recibir chatarra de otros países, recordemos que los vehículos que más contaminan son los más viejos no los más nuevos. Es necesaria una solución integral que impulse la renovación de la flota sin que impacte al micro y pequeño empresario que tiene que retirar de circulación su vehículo. Estamos poniendo en riesgo la vida y la salud de las y los mexicanos al continuar envejeciendo la flota”, agregó.
srgs