La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) aseveró que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) debe hacer un análisis sobre la ejecución de sus operativos, luego del revuelo en redes sociales que causó recientemente el análisis a 33 marcas de sopas instantáneas en el país.
"Trabajar por golpes de timón por parte de Profeco no es más que el reflejo de una falta de política estructurada, de tener un control sistemático del mercado. No puedes trabajar por evento. No dependemos es un producto bueno o nocivo, eso toca a Cofepris si son productos buenos o malos para su consumo; si son malos no debieron darles el permiso de comercializar", dijo en conferencia Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Anpec.
Solicitó que la dependencia que dirige Ricardo Sheffield Padilla no debe trabajar por evento pues "pareciera que es por azar". Agregó que debería haber una política de control.
De acuerdo con el representante del pequeño comercio, dentro de las tiendas del país no hubieron compras de pánico y estimó que estos movimientos pudieron darse en el canal de conveniencia y autoservicios.
Según información de la división Worldpanel para la investigadora de mercados Kantar, se estima que 72 por ciento de los hogares de México consume sopas instantáneas.
"Son consumos de la gente que trabaja al día y que no alcanza a llegar a sus casas a comer que no tiene mucho ingresos y busca comer en movimiento y calentarlo en los puntos de venta, se los comen y adelante. En las metrópolis hay mucha población que trabaja en esas condiciones muy dura, lo que hacen es ir a lo que encuentren. Tienen un mercado y una demanda muy clara de un perfil que es su opción de consumo o lo prefieren", dijo Rivera.
El representante concluyó que la Profeco no debería construir una política "con base en ruido" y optar por un adecuado control de mercado que busque tener un manejo estructurado de sus operaciones.
MRA