Luego que se publicó un decreto en el pasado mes de enero y que entrará en vigor en junio de este año sobre una nueva ley en Quintana Roo que prohíbe la venta de productos que no vengan en envases retornables, la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) aseguró que esto afectará seriamente a todos los negocios y sobre todo a los miles de consumidores.
En videoconferencia de prensa, el titular del organismo, Cuauhtémoc Rivera, recordó que el 80 por ciento de lo que se comercializa están en el rubro de uso de plástico. Por lo que la falta de insumos y apoyo de las autoridades para esta medida a las pequeñas empresas, generará un aumento del comercio informal de los diferentes productos plásticos que actualmente se comercializan.
“Nos referimos al mercado negro de los productos que existan, porque al no haber retornables, los que van a existir en el resto del país, son los que ahorita hay, qué va a hacer la gente, va a ir a comprarlos a Yucatán, a Campeche, a la entidades aledañas, y los van a traer a Quintana Roo, y se van a vender en las cajuelas de los vehículos y de manera informal.”, aseveró.
Agregó que, al no poderse vender los productos normales de plástico de manera formal por parte de las empresas, “si lo cacha un inspector municipal, te va a clavar una multa que siendo chiquita, estamos hablando de 2 mil pesos, y la más cara de 4 millones de pesos, o para darle una mordida, al inspector, y las mordidas ahorita son de 500 pesos."
Ante eso, aclaró que los pequeños comerciantes no están en contra de las medidas que protejan el medio ambiente, así como de los diferentes recursos naturales que impulsen la economía circular. Sin embargo, expuso que, derivado de las afectaciones económicas por la pandemia e inseguridad, “no hay en estos momentos las condiciones para que esta nueva ley entre en vigor."
“No es tanto porque nosotros nos opongamos ir para atrás, sino un reglamento que no se consensa de manera democrática, es un reglamento que está condenado al fracaso, nace con letra muerta, porque puede estar el reglamento pero nadie lo va a cumplir, nadie lo va a reconocer como válido, porque es un reglamento que está fuera del sentido común. Este reglamento lo ideal sería derogarlo y volverlo a discutir oye, no nos alcanza el músculo para eso, bueno, dame una prórroga para que entre en función.”, aseguró.
Sobre si pedirán una prórroga para que las empresas tengan tiempo para adaptarse, señaló que el gobernador de la entidad que terminará su mandato en este año, deja una mala impresión a los habitantes del Quintana Roo, “y un problema a la próxima administración, necesitamos una prórroga. Insistimos en la necesidad de abordar con el diálogo esta medida antes de que genere más problemas a los que ya tiene la entidad."
AMT