Ante la intención de Donald Trump de fortalecer la economía estadunidense mediante la imposición de aranceles a países como China, Canadá y México, se está generando incertidumbre en lo mercados, sin embargo, estos aranceles afectan tanto a los socios comerciales de Estados Unidos como a su propia economía.
En este contexto, el analista de mercados para ATFX Latam, Felipe Mendoza, comentó que el consumidor final estadunidense suele absorber el impacto de estos impuestos.
Además, indicó que las exportaciones desde China alcanzaron picos históricos anticipados debido a la expectativa de un aumento en los aranceles, lo que demuestra la dependencia entre ambas economías.
“Aunque el discurso de Trump puede parecer extremo, las relaciones comerciales no se están rompiendo por completo. Más bien, están evolucionando hacia un modelo donde los costos se incrementan, impactando la inflación y las decisiones de consumo”, indicó.
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¿Cuáles serían los sectores más afectados por aranceles?
“El mercado financiero reacciona intensamente ante la retórica de Trump, basándose más en el rumor que en hechos concretos. Esto genera volatilidad en variables clave como la paridad dólar-peso mexicano, afectando a inversionistas y empresas. A pesar de esto, los mercados son resilientes y están aprendiendo a operar en contextos de incertidumbre”, agregó Mendoza.
Además, indicó que los sectores más afectados son aquellos que dependen de bienes de consumo e infraestructura, donde el aumento en los costos por aranceles puede volver insostenibles algunos proyectos.
Sin embargo, sectores como los servicios no parecen enfrentarse a los mismos riesgos, mientras que las fusiones, recompra de acciones y adquisiciones, aunque podrían ralentizarse en algunos casos, no desaparecerán, ya que el sector privado históricamente ha demostrado ser un motor económico que supera obstáculos en los impuestos por políticas gubernamentales.
“A mediano y largo plazo, las decisiones de política monetaria de Estados Unidos, como el control de tasas de interés por parte de la Reserva Federal, van a ser clave para mitigar los efectos inflacionarios derivados de los aranceles”, explicó.
“En cuanto a México, el país podría compensar los costos arancelarios mediante la depreciación del peso, lo que favorecería la competitividad en exportaciones", aseveró.
"Sin embargo, el país enfrenta el reto de adaptarse rápidamente a este nuevo panorama económico y a la buena toma de decisiones de política interna”, agregó.
Por su parte, indicó que estas políticas proteccionistas de Donald Trump representan un desafío significativo para los mercados globales, pero no implican una ruptura total de relaciones comerciales.
“Más bien, obligan a los países y empresas a adaptarse a un entorno más competitivo, por lo que el sector privado jugará un papel esencial para mitigar los impactos negativos y buscar soluciones innovadoras que permitan la continuidad del crecimiento económico”, finalizó.
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KL