La empresa Exportadora de Sal (ESSA), de participación estatal mayoritaria, no fue rentable en términos de la inversión, en eficiencia económica y beneficios para el Estado mexicano, informó la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
En la tercera entrega de la cuenta pública de 2018, la ASF indicó que la empresa no fue productiva ya que en sus activos totales, capital contable y capital empleado no fue superior a la tasa social de descuento determinada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), esto como referencia para aprobar o desechar un proyecto de inversión.
“Por lo que ha incumplido el objetivo de administrar los recursos con eficiencia, eficacia y economía; asimismo, destruyó valor económico por 526 millones 522 mil pesos, y aumentó su riesgo de quiebra, en perjuicio de las finanzas del Estado; del mercado nacional e internacional de sal, así como, de forma inmediata, de los 16 mil habitantes de Guerrero Negro, Baja California Sur”, destacó.
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La ASF aseguró que los resultados obtenidos por Exportadora de Sal en 2018, “no generaron rentabilidad, eficiencia económica y beneficios para el Estado, debido a que se identificaron deficiencias en el desempeño financiero, operativo y administrativo”.
“Destacan, la falta de implementación de las mejores prácticas para el registro de información financiera y de gobierno corporativo, lo que originó inconsistencias en la valuación por 4 millones 327 mil 577 dólares, en la situación financiera de la empresa, por lo que esto no fue confiable, e impide la adecuada rendición de cuentas, elevando el riesgo de la materialización de actos de fraude y corrupción, en perjuicio de la estabilidad y de las finanzas de la empresa”, aseguró la ASF.
Añadió que las diferencias entre el valor del margen de intermediación por comercialización de sal a Japón estimado por la ASF en 12 millones de dólares y el valor de la comisión por ventas estimado en un millón 685 mil dólares con base en lo señalado en convenio modificatorio de 2010.
“El Estado mantiene su participación accionaria en la empresa, y ESSA garantizará mejores condiciones para generar rentabilidad, valor y eficiencia económica; operar con flexibilidad y fortalecer las capacidades administrativas; contará con una mejor política de dividendos que deberá entregar a la nación, con base en los resultados financieros”, concluyó.
lvm