Los bancos aprovechan cada vez más las ventajas de la inteligencia artificial (AI) y análisis en áreas como fraude y riesgo en administración, pero todavía hay espacio para expandir esto a otras áreas para aprovechar el nuevo potencial de ingresos y reinvente la experiencia del usuario.
Y es que el uso de las tecnologías de IA podría potencialmente entregar hasta mil millones de dólares de valor adicional cada año a este segmento, de acuerdo con un reporte de McKinsey.
Así, la banca "ubicua", que integra todo tipo de dispositivos tecnológicos, promoverá el pago digital entre los clientes financieros y acercará el fin del dinero físico, así como el desuso de las tarjetas de crédito y débito, según de la plataforma de core bancario, Mambu y Google Cloud.
El reporte Bank of the Future de ambas empresas de tecnología, indicó que, en el mundo digital siempre conectado, existe la oportunidad para que los bancos alcancen nuevos mercados y construir experiencias excepcionales para los clientes con tecnología basada en la nube que genera servicios más asequibles, intuitivos y con recursos ligeros, volviendo a los bancos aún más competitivos.
El informe muestra también que la pandemia ha aumentado la demanda de los consumidores por servicios financieros digitales personalizados y móviles que están siempre disponibles. A diferencia de hace 20 años, los bancos tradicionales ya no son los preferidos por quienes buscan mover o administrar su dinero.
“Con un mejor acceso a los servicios en la nube y una competencia cada vez mayor de una nueva ola de fintechs y jugadores no tradicionales, los bancos establecidos se ven amenazados a medida que los consumidores recurren a los neobancos y a los competidores digitales en busca de una mejor experiencia para el cliente y servicios centrados en el consumidor”, explica el análisis.
Acompañado de esto, Mambu aseguró que son necesarios cambios en la regulación, como la introducción de la banca abierta y PSD2, como fuerzas que aceleran la desintermediación de los proveedores bancarios tradicionales. “Con una regulación dedicada que ahora está surgiendo para las fintechs y los bancos digitales en algunas jurisdicciones, es un caso de adaptarse o morir para los actores establecidos”.
Con alrededor de mil millones de transacciones con tarjeta de crédito todos los días, los bancos tienen acceso a uno de los mayores volúmenes de datos de clientes de cualquier industria. Con la inteligencia artificial, los bancos pueden aprovechar esta información para desbloquear conocimientos y crecimiento incomparables.
srgs