Ante un entorno de "marcada incertidumbre", la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió aumentar su tasa de interés en 25 puntos base, a un nivel de 8.25 por ciento, igualando el máximo histórico alcanzado en 2008.
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El aumento, que es el cuarto del año y la última decisión de política monetaria del Banxico en 2018, ocurre después de que ayer la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) también aumentara su tasa de referencia.
"El entorno actual presenta importantes riesgos de mediano y largo plazos que pudieran afectar las condiciones macroeconómicas del país, su capacidad de crecimiento y la formación de precios en la economía", consideró el banco central en su anuncio.
Destacó que desde su pasada reunión de política monetaria los precios de los activos financieros mexicanos continuaron mostrando volatilidad y el peso mexicano siguió "reflejando la incertidumbre en torno a las políticas de la nueva administración".
Además, consideró que la inflación enfrenta "riesgos de carácter estructural derivados de la posible adopción de políticas que pudieran conducir a cambios profundos en el proceso de formación de precios en la economía".
Sobre el aumento anunciados para el salario mínimo, dijo que, además de su impacto directo, podrían propiciar revisiones salariales que generen "presiones de costos con afectaciones en el empleo formal y en los precios".
Por su parte, para el sector externo Banxico advirtió que la actividad global podría verse afectada "por la volatilidad de los precios del petróleo y por diversos factores políticos y geopolíticos".
GGA