Las transferencias a través del Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) se mantienen en crecimiento, por lo que el Banco de México (Banxico) estima que este año se liquiden más 3 mil millones de transacciones.
La subgobernadora del Banxico, Galia Borja dio a conocer también que esta adopción de pagos por transferencia, está ligada en mayor medida a montos menores a 8 mil pesos, que en 2021 representaron 79 por ciento de estas.
El año pasado, el total de transacciones vía SPEI fue de casi 2 mil millones, esto representa un crecimiento de más de mil por ciento en 10 años.
El SPEI permite hacer transacciones en tiempo real todo el día todos los días con operaciones estandarizadas en tiempo real y con participación directa de las entidades financieras, es decir, están conectados al sistema en todo momento.
Criptomonedas son “ineficientes” como reserva de valor
Al participar en el segundo día de actividades de la Asociación Mexicana de Entidades Financieras Especializadas (AMFE), Galia Borja también habló sobre la implementación de monedas digitales, pero aseguró que las criptomonedas como el bitcoin son “ineficientes” para que puedan ser considerados como una reserva de valor por parte del Banco de México, debido a la alta volatilidad que tienen y a que no son dinero con respaldo.
Por lo que los activos virtuales han tomado relevancia para hacer pagos descentralizados, desvinculados y sin respaldo de las instituciones financieras.
“Los activos virtuales no pueden ser considerados moneda… incumplen con las regulaciones, aunque se pueden comprar bienes y servicios, son pocos los comercios que los aceptan, los precios de estos activos están sujetos a cambios constantes, lo que limita sus características… son ineficientes para ser una reserva de valor”, dijo.
Borja explicó que los compradores de activos digitales los adquieren debido a que ofrecen altos rendimientos y “con la esperanza” que cuando los vendan sean más caros.
Mientras que el Banco de México trabaja en la implementación de una moneda digital que sí esté respaldada por el banco central y que opere a la par que el dinero físico, que actualmente aún representa el 80 por ciento de las transacciones menores a 500 pesos, por lo que aún queda un amplio camino por recorrer.
IPM