El presidente del BBVA, Carlos Torres, declaró que confía en que la recuperación económica se mantenga este año tras la pandemia, aunque reconoció que el conflicto en Ucrania inevitablemente afectará al crecimiento económico y aumentará la incertidumbre.
“Esperamos que la recuperación continúe en 2022, aunque el conflicto tiene un impacto sobre la inflación, sobre el crecimiento, y, sobre todo, aumenta de manera importante la incertidumbre”, declaró Torres en Bilbao (País Vasco), donde se llevó a cabo la junta general de accionistas.
Señaló que “no hay duda” de que la guerra en Ucrania tendrá como consecuencia un aumento de la inflación que afectará al crecimiento, aunque “con importantes diferencias entre países”. “La magnitud de estos impactos dependerá de muchos factores, incluyendo la respuesta de las políticas monetaria, fiscal y regulatoria”, indicó.
Además, declaró que el conflicto tendrá “repercusiones estructurales sobre la economía mundial, condicionando la relación entre bloques y el comercio internacional”. “Posiblemente estemos ante un nuevo orden mundial”.
El banquero español consideró que la respuesta que está dando Europa a la crisis implica “una clara señal del compromiso con una mayor integración”, si bien considera que, “en el plano energético, Europa debe caminar hacia una mayor independencia, lo que debe servir para movilizar la economía hacia las energías renovables con mayor celeridad si cabe”.
Además, destacó el “impacto inmediato”, de la guerra. “Tendrá importantes repercusiones estructurales en la geopolítica y en la economía mundial, condicionando las relaciones internacionales en todos los ámbitos. Estamos ante un nuevo orden mundial”, insistió.
En cualquier caso, Carlos Torres deseó que “termine cuanto antes este drama” humano que supone el conflicto bélico. “Algo que creíamos superado en Europa y que, más allá de su impacto en la geopolítica y en la economía mundiales, que es grande, supone una enorme tragedia humana”.
mra / srgs