La empresa alemana BMW avanza en su estrategia de producción de vehículos eléctricos llamado Neue Klasse en México con el establecimiento de su nueva planta de ensamble de baterías, pero también ya sumaron nuevos proveedores para cumplir con esta visión.
Harald Gottsche, presidente y CEO de la planta de BMW en San Luís Potosí, explicó que lo más importante que traen del exterior es el motor y transmisión, que esos seguirán importándose de Europa, pero el resto de las piezas ya están o pronto estarán más cerca de la fábrica.
“Queremos establecer o fabricar más en el país y por eso tenemos ya en proceso el armado de las celdas de baterías, carcasas y las carrocerías y vamos a tener nuevos proveedores”, explicó en una mesa con medios de todo el mundo tras una visita en diversos puntos de la planta para hablar de sus avances en responsabilidad social.
En estos momentos BMW está avanzando en la expansión de su fábrica en San Luis Potosí, donde sumarán 20 mil metros cuadrados de body shop, además de 80 mil metros cuadrados que serán para el ensamble de baterías y 10 mil metros cuadrados más para operaciones de logística.
Sobre la baja producción de la armadora en este año, Harald Gottsche respondió que es por paros técnicos planeados porque están sumando procesos de digitalización en algunas áreas, mismas que ayudarán en su transformación.
“Antes que nada vamos a terminar el edificio para la fabricación de modelos de batería el próximo año y tendremos a finales del mismo o en principios de 2026 el prototipo”, contó.
Como parte de su responsabilidad social, la empresa también está buscando que todos sus procesos sean con electricidad 100 por ciento renovable, además de que están considerando el uso de biometano para reducir su consumo de gas natural en 2026; además de minimizar el impacto de los proveedores para 2030.
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KL