Boeing logra su primer pedido del 737 Max desde que avión fue puesto en tierra

El pedido marca el comienzo de los esfuerzos para rehabilitar la aeronave -así como la propia reputación de Boeing- después de que en dos accidentes mortales en un espacio de cinco murieron 346 personas.

El más reciente aparato de la empresa aeroespacial.
Peggy Hollinger, Philip Georgiadis y Claire Bushey
Londres /

El jueves, Boeing logró su primer pedido en firme para el problemático 737 Max desde que el avión fue puesto en tierra hace 20 meses, con un acuerdo multimillonario para 75 aviones de pasajeros de Ryanair, la aerolínea de bajo costo más grande de Europa.

El pedido marca el comienzo de los esfuerzos para rehabilitar la aeronave -así como la propia reputación de Boeing- después de que en dos accidentes mortales en un espacio de cinco murieron 346 personas.

Las investigaciones posteriores a los accidentes revelaron que Boeing ocultó defectos de diseño en el software de control de vuelo a los pilotos y reguladores en su prisa por obtener la certificación del avión.

Se rediseñó el defectuoso sistema antibloqueo, considerado un factor crítico en los accidentes, y los pilotos tendrán que pasar por programas de entrenamiento más extensos.

El mes pasado, la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) declaró el avión como seguro para volar y se espera que otros reguladores sigan su ejemplo en las próximas semanas.

Michael O’Leary, director ejecutivo de Ryanair -ya uno de los mayores clientes del Max de Boeing- dijo que está “seguro de que a nuestros clientes les encantarán estos nuevos aviones”.

A precio de lista, el pedido tiene un valor cercano a 8 mil millones de dólares (mdd), pero los analistas esperan que el jefe de Ryanair haya negociado un gran descuento. Normalmente, los aviones se venden con descuentos de alrededor de 50 por ciento a los precios de catálogo, pero es probable que en el clima actual la reducción haya sido aún mayor.

O'Leary dijo en una conferencia de prensa que Ryanair recibió un “modesto” descuento en sus aviones, así como una compensación por retrasos en las entregas.

“Mi única queja hoy es que creo que el descuento debería haber sido mayor”, dijo. “Estoy seguro de que (Dave Calhoun, el director ejecutivo de Boeing) piensa que debería haber sido menor”.

Pero Scott Hamilton de Leeham, una consultora del sector aeroespacial, señaló que “modesto” es un término subjetivo.

“Michael O'Leary es un conocido oportunista”, dijo. “Creo que consiguió un muy buen trato. Ya sea en una compensación o descuentos grandes, muy grandes, dinero por todos lados. Michael habrá jugado esto muy bien a su favor”.

El precio tal vez se pudo mitigar con un alivio en los pagos iniciales, en el costo de los aranceles de la Unión Europea impuestos a los aviones Boeing en la batalla por los subsidios y “mucha flexibilidad en los programas de entrega”, dijo Rob Stallard, analista del sector aeroespacial de Vertical Research Partners.

Calhoun dijo que “siempre tuvo fe en que las carteras de pedidos comenzarían a llenarse” una vez que los reguladores aprobaran el avión como seguro para volar y la industria empezara a recuperarse.

También sugirió que las expectativas de Boeing para la recuperación de la industria recibieron un empujón por la perspectiva de una vacuna exitosa contra el coronavirus. La línea de tiempo para la recuperación es “un poco más agresiva” que la de su pronóstico a principios de este año para una recuperación de tres a cinco años, dijo.

La decisión de Ryanair de comprometerse a una expansión de la flota durante una de las recesiones más profundas de la industria también indica su determinación de cimentar una ventaja de costos sobre competidores emergentes como Wizz Air, la aerolínea de rápido crecimiento.

El 737 Max 8200 se basa en la variante central del Max 8, pero podrá transportar aproximadamente ocho pasajeros más que generan ingresos.

Ryanair dijo que comenzaría a recibir las entregas del avión desde principios del próximo año hasta diciembre de 2024. Eso eleva el pedido total de esos aviones más grandes por parte de la aerolínea a 210. Se dijo que se van a utilizar para reemplazar la antigua variante NG y son hasta 16 por ciento más eficientes en el consumo de combustible.

Para Boeing, la esperanza es que el pedido despierte la confianza en el Max, que incluso antes de la crisis estaba a la zaga de la familia A320 de su rival Airbus en pedidos netos.

En total, se han vendido 4 mil 489 aviones Max de pasillo único frente a 7,455 variantes del A320neo de Airbus, de acuerdo con Cirium, el especialista de datos de flotas. Cirium también señala que tan solo este año poco más de mil pedidos se cancelaron o Boeing considera que se corre el riesgo de una cancelación.

lvm

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