La fabricante de productos de envase y embalaje amigables con el medio ambiente Bioelements resaltó que las bolsas de plástico comenzaron a utilizarse con mayor frecuencia en México luego de la pandemia por covid-19.
Bioelements refirió que antes de la crisis sanitaria, por persona se utilizaban en promedio 150 bolsas de plástico al año, cifra que se incrementó a 180 en 2020.
La firma de origen chileno destacó que, tras la prohibición de plásticos de un solo uso en Ciudad de México a partir de enero del año pasado, se esperaba que estos entraran en desuso, no obstante, la cifra obtenida del informe de desechos sólidos del programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, sobre dicho aumento de 30 bolsas utilizadas en promedio por cada mexicano, mostró lo contrario.
Subrayó que estos artículos ofrecen ventajas como su funcionalidad, resistencia y permeabilidad, las cuales las han consolidado como un producto “indispensable” ya que en Ciudad de México se utilizaban 10 millones de bolsas cada minuto hasta 2019, de acuerdo con los últimos datos del gobierno capitalino.
Ante estos números, Bioelements resaltó que las bolsas de plástico tardan en degradarse hasta 400 años y que en este periodo dicho artículo es tóxico para el medio ambiente en el cual se encuentra en contacto, además de que la mayor parte de éstas no se reutilizan ni se reciclan y acaban en basureros o en el mar.
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Indicó que en Estados Unidos una familia consume en promedio mil 500 bolsas de plástico al año, mientras que en México la cifra es de 650 unidades, de acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas. Pese a que la cifra en México es menor, la firma chilena considera que deben seguirse impulsando acciones a favor del medio ambiente. A nivel mundial se producen 500 mil millones de bolsas de plástico anuales.
José Ignacio Parada, CEO de Bioelements, resaltó que el desarrollo tecnológico y la investigación han permitido impulsar alternativas al plástico que pueden biodegradarse en un periodo de entre seis y 20 meses.
Pese a lo anterior, advirtió que existen algunas bolsas que, aunque “presumen” de ser amigables con el medio ambiente no lo son, ya que utilizan aditivos que fragmentan de forma diminuta el plástico, pero no disminuyen su masa por una actividad de biodegradación. “Es decir, se fragmentan, pero persisten durante siglos”, añadió.
Las bolsas reciclables son aquellas fabricadas a partir de materiales que pueden ser reutilizados, sin embargo, Greenpeace estima que del total de unidades fabricadas solamente 6 por ciento es reciclado. Calcula que en México hay entre 0.01 y 0.25 millones de toneladas métricas de plástico por cada kilómetro cuadrado que hay en el mar, lo que es equivalente a tirar en los mantos acuíferos un camión repleto de basura cada minuto.
En tanto, pese a que la utilización de bolsas de plástico fue al alza el año pasado, las horas trabajadas por el personal dedicado a la industria del plástico y el hule disminuyeron 2.4 por ciento en 2020 contra el año anterior, mientras que el personal ocupado cayó 2.1 por ciento, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
AMP