El paso hacia el extranjero por parte de la empresa mexicana de la industria de alimentos La Costeña se realizó en la década de los 80; hoy la compañía a través de la diversificación de su portafolio con chiles, salsas, tamales, entre otros alimentos, ha ido aumentando sus exportaciones, dijo en entrevista con MILENIO su director general, Rafael Celorio.
Hace apenas dos años las ventas al exterior para la empresa fundada por Vicente López Resines representaban 15 por ciento del total de sus ventas y ahora alcanzan 17 por ciento; de acuerdo con Celorio, para cierre de año estiman alcanzar hasta un punto porcentual más.
“Lo que más exportamos son chiles, frijoles y salsas. Sin embargo, ya estamos empezando mucho con Totis y tamales en el caso de Estados Unidos”, afirmó. Para Centroamérica, Sudamérica y Europa lo que más se comercializa son las verduras y puré de tomate.
Pese a que ha habido una disminución en la participación del mercado de Estados Unidos en el total de productos que se venden fuera de México, ese país continúa siendo el principal destino de ventas al exterior para la compañía fundada en 1923.
“Los aranceles en Estados Unidos no los pusieron y eso no terminó impactándonos, al contrario, hemos crecido. El porcentaje de participación de ese país en las exportaciones debe estar en 78 por ciento; hemos crecido mucho en Europa, Australia y China, pero los volúmenes, aunque han crecido al doble, siguen siendo mucho más bajos de lo que se consume en Estados Unidos”, afirmó.
Los mercados australiano y asiático, de los de mayor crecimiento en los últimos años, han anclado su desarrollo de la mano de cadenas de restaurantes, las cuales han solicitado productos para sus unidades, dijo Celorio.
El mercado sudamericano, que es el que tiene una menor participación para la empresa, será uno de los focos para su crecimiento fuera del país, principalmente con las exportaciones de chile.
Crecimiento
De acuerdo con Rafael Celorio, las ampliaciones importantes que tenían para sus plantas de San Luis Potosí, Ecatepec y Sinaloa ya finalizaron; sin embargo, la firma aún continúa con algunas incorporaciones de líneas de producto, como es el caso de la planta de botanas de Totis, en Tizayuca, Hidalgo, a la cual trasladaron la producción de su planta de Chiapas el año pasado.
“Este año vamos a cerrar con un crecimiento en ventas de entre 6 y 8 por ciento. Las plantas ya están preparadas por si crecemos más, pensamos que vamos a tener un buen semestre y el próximo año va a ser mejor, vamos en buen camino”, indicó.
Celorio afirmó que la inversión principal que realizarán este año será la incorporación de un nuevo centro de distribución en Ecatepec, Edomex. El complejo estará totalmente automatizado y aunque no reveló el monto de inversión, sostuvo que a éste se destinarán esfuerzos importantes.
Además, recientemente la empresa compró Galletas Marian, otra de las inyecciones de capital más importantes de 2019 para La Costeña, y aunque el plan es consolidar la marca en México, la intención es exportarla a EU en 2020.
“Es una galleta muy fina entre los mexicanos y queremos hacerla con la misma calidad”, dijo Celorio; por el momento su producción se mantendrá en Vallejo.
1923
Nace Conservas La Costeña, gracias a don Vicente López Resines, quien compró una tienda de abarrotes llamada La Costeña, que hizo famosa por sus chiles en vinagre.
1937
Don Vicente comienza a fabricar sus propias latas. Nace la primera planta de producción en CdMx.
1951
Sus productos comienzan a distribuirse en todo México. Abren nueva planta en Ecatepec, Edomex, y en 1986 otra en Guasave, Sinaloa.
2007
Inauguran su Centro Automatizado de Distribución. En 2018 la firma cumple 95 años de operaciones.