Con el cierre de la carretera México–Toluca a la altura del km 47 de 11 de la noche a 5 de la mañana a partir de este 7 de junio y los miércoles subsecuentes hasta el 13 de septiembre por los trabajos para del Tren Interurbano, la iniciativa privada prevé afectaciones en el traslado de mercancías, por lo que solicitará a las autoridades federales que las vías alternas sean eficientes y garanticen la seguridad de las unidades y sus operadores en su tránsito.
Rogelio Argüelles, presidente de la Asociación de Industriales del Parque Toluca 2000, explicó que son más de 2 mil las toneladas, principalmente de materia prima, que se mueven todos los días en el horario de cierre, es decir, entre las 11 de la noche y las 5 de la mañana y aunque no tienen perdidas cuantificables, su modelo de operación puede verse afectado, especialmente por el tiempo de traslado
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Señaló que otro punto que debe tomarse en cuenta es que hace unos días y tras un fatal accidente quedó prohibida la circulación del transporte de carga por la autopista Toluca–La Marquesa, por lo que las opciones de circulación para este sector se ven aún más limitadas.
KVS