La financiera tecnológica Plata recibió la autorización por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) para ser un banco en México, de acuerdo con información emitida por el portal Bloomberg.
MILENIO consultó a Plata Card pero no emitió respuesta, pero fuentes con conocimiento en la situación dicen que no se podrá emitir ninguna comunicación oficial hasta que salga el oficio de las autoridades.
Plata es una plataforma impulsada por inteligencia artificial que fue creada por el empresario Neri Tollardo.
Cuenta con un equipo de más de 700 empleados de más de 20 nacionalidades; Plata está basada en México, de acuerdo a su portal.
De acuerdo con la agencia calificadora Moody´s, en los últimos tres años, al menos una decena de entidades con diferentes perfiles, entre casas de bolsa, bancos y entidades financieras, solicitaron una licencia bancaria; por ejemplo, Mercado Pago o Nu, que aún siguen en proceso.
También se informó el 10 de diciembre pasado que Masari Casa de Bolsa y la financiera Klar buscan también la licencia bancaria.
Federico de Noriega, socio abogado de la firma Hogan Lovells, señaló que una de las principales razones por las que se está pidiendo esta autorización es por el alcance de las actividades que pueden hacer las financieras bajo la ley fintech.
“El alcance de sus actividades permitidas no les deja desarrollar todo su modelo de negocios. Muchos querían sacar medios de pago, tarjetas o dinero electrónico y también se dieron cuenta que uno de los servicios bancarios más rentables para las instituciones financieras y más necesarios en el país, es el otorgamiento de crédito, y estas firmas tecnológicas tienen prohibido otorgar crédito”, comentó para MILENIO.
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Además, de acuerdo con Moody´s, la transición de las fintech que ya están captando dinero de los depositantes o están en posición ya de emitir deudas quirografarias en el mercado doméstico al modelo más regulado que existe, el bancario, sería positivo para la estabilidad del sistema financiero.
Al mismo tiempo, también sería beneficioso para los bancos tradicionales mexicanos que tengan competidores con los mismos costos regulatorios y competirán en un terreno parejo.
“Ciertamente, sería positivo para los modelos disruptivos, puesto que probarán su validez, al cumplir la rigurosa y prudencial regulación bancaria mexicana y gozarán de los beneficios de tener una licencia bancaria”, dijo la agencia calificadora en un reporte.