La probable eliminación de los órganos autónomos podría desencadenar consecuencias profundas y de largo alcance para la estabilidad económica del país, así como para su estructura democrática y de gobernanza, de acuerdo con la International Chamber of Commerce (ICC).
“Nos preocupa la falta de claridad sobre cómo se reasignarían las funciones de estos órganos, porque podría complicar la revisión y cumplimiento de compromisos internacionales, como los establecidos en el Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC)”, dijo a través de un comunicado.
La eliminación de los OCAs podría repercutir en la percepción internacional de México como un socio comercial confiable y comprometido con el Estado de Derecho, puesto que estos órganos son vistos como garantías de la estabilidad democrática y de una gobernanza económica justa, por lo que su desaparición podría debilitar la posición del país en el escenario global.
“La eliminación de estos organismos abriría la puerta a una mayor concentración de poder económico, con riesgos importantes para la economía nacional y la competitividad en el mercado global, generando un efecto negativo sobre la confianza de los inversionistas nacionales e internacionales”, comentó.
La ICC agregó que está situación podría derivar en una menor inversión extranjera directa, afectando el crecimiento económico del país y la economía familiar.
¿Cuáles órganos podrían desaparecer y cómo impactaría su ausencia?
El dictamen que fue aprobado el viernes en Comisiones de la Cámara de Diputados, establece la eliminación de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Así como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Además de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y el Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación.
De acuerdo con la ICC, la eliminación de la Cofece politizaría la regulación del mercado y debilitaría los mecanismos que aseguran una competencia justa, resultando en un aumento de precios y disminución en la calidad de los bienes y servicios.
“La incertidumbre jurídica y regulatoria derivada de su eliminación también podría desincentivar la inversión nacional y extranjera, afectando negativamente el crecimiento económico y la creación de empleos, lo que tendría repercusiones adversas para la economía del país y el bienestar de los consumidores”, advirtió.
Mientras que la desaparición del IFT afectaría la independencia regulatoria del sector de telecomunicaciones y radiodifusión y reduciría la competencia, favorecería prácticas monopólicas y elevaría los costos para los consumidores, mientras que la calidad y la supervisión de los servicios también se verían comprometidas.
Señaló que a nivel internacional podría complicar el cumplimiento de compromisos asumidos por México en tratados como el T-MEC, afectando su competitividad global y enviando señales negativas a los mercados internacionales
Indicó que también se frenaría la innovación y el desarrollo tecnológico en el sector, lo que tendría un efecto negativo en la capacidad del país para mantenerse competitivo en el ámbito global y en la protección de los derechos de los usuarios en el sector de telecomunicaciones.
Asimismo, la ausencia del INAI reduciría la capacidad de la ciudadanía para acceder a la información pública, lo que podría facilitar prácticas de corrupción y abuso de poder, ya que no habría un mecanismo independiente y especializado para garantizar que el gobierno y otras entidades públicas proporcionen la información solicitada.
Se debilitaría la cultura de transparencia que se desarrolló en el país, afectando la confianza de los ciudadanos en las instituciones públicas.
“Hacemos un llamado a los legisladores para reconsiderar la eliminación de los OCAs, dada la importancia para el país en un momento de oportunidad por el nearshoring, de mantener organismos independientes que garanticen la imparcialidad en áreas críticas como la competencia económica, telecomunicaciones, y transparencia, como órganos fundamentales para evitar la concentración de poder y proteger la democracia”, finalizó.
MRA