La empresa Infraestructura Energética Nova (IEnova), señaló que si no se alcanza una resolución satisfactoria y oportuna en las negociaciones o arbitraje por el gasoducto Marino Sur de Texas-Tuxpan con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), puede haber un impacto financiero adverso importante, señaló en su reporte al segundo trimestre del año.
- Te recomendamos Empresarios se reunirán con AMLO por conflicto de gasoductos Negocios
La filial de la estadunidense Sempra Energy, detalló que en junio de 2019, el negocio en conjunto con TC Energy (Transcanada) terminó la construcción del gasoducto Sur de Texas-Tuxpan de 775 kilómetros y está listo para comenzar las operaciones comerciales.
Sin embargo, la CFE no ha otorgado el certificado de aceptación por lo que el gasoducto no ha podido iniciar los servicios de transporte conforme al contrato, esto sumado a que en junio de 2019, las empresas recibieron una solicitud de arbitraje de la empresa del Estado a través de la cual solicitó la anulación de referentes a casos fortuitos o de fuerza mayor, así como reembolsos y pagos aplicables a dichos eventos.
Otro de los gasoductos de la compañía que tiene un problema similar, es el segmento Guaymas-El Oro, donde una de las secciones no funciona desde el 23 de agosto de 2017, declarando un evento de fuerza mayor de acuerdo con el contrato
IEnova señala que además recibió una orden judicial que le ha impedido realizar reparaciones para volver a poner el gasoducto en servicio. "Si los demandantes apelan la decisión, la orden de suspensión que impide a IEnova reparar el daño al gasoducto en el territorio Yaqui permanecerá vigente hasta que se termine el proceso de apelación".
- Te recomendamos CFE pide eliminar ciertas cláusulas para ducto Guaymas-El oro: IEnova Negocios
La empresa señaló que está buscando junto con CFE alcanzar un acuerdo para extender el período de fuerza mayor. "De acuerdo al contrato y antes de la expiración del período de fuerza mayor, la compañía puede rescindir el contrato y buscar recuperar los costos no recuperables y pérdidas de beneficios razonables y documentados".
Pese a esto la empresa reportó en el segundo trimestre de 2019 un flujo operativo (EBITDA) de 225 millones de dólares, lo que representó 2.6 por ciento respecto al mismo periodo de 2018, de acuerdo con lo enviado a los inversionistas.
Este resultado fue derivado por mayores ingresos en su planta termoeléctrica de Mexicali y la puesta en marcha de su parque solar Pima Solar.
La utilidad en el segundo trimestre fue de 113 millones de dólares, comparado con 102 millones en el mismo periodo de 2018. "Se debió principalmente a los efectos de tipo de cambio, que no significan flujo de efectivo, como resultado de la depreciación del peso en el segundo trimestre de 2018, y un mayor resultado de operación de la planta de energía Termoeléctrica de Mexicali", destacó IEnova.
lvm