La agencia calificadora HR Ratings estima que 2023 será un año con la pandemia del covid-19 bajo control y, si bien con la inflación y el alza en las tasas de interés se cierra una ventana de oportunidad para el sector de infraestructura en México, aún quedan espacios para demandar financiamiento y la relocalización de empresas o nearshoring para estar cerca del mercado estadunidense representa una oportunidad para el país.
“Todavía vemos en el mercado apetito para demandar financiamiento por parte de las empresas. Esto tiene que ver porque, ciertamente, tenemos una tasa de interés creciente, pero también un tipo de cambio estable y esto de alguna manera favorece que todavía veamos demanda de financiamiento”, señaló el director ejecutivo senior de Finanzas Públicas e Infraestructura de HR Ratings, Roberto Ballinez.
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Durante la videoconferencia Evolución del Sector de Infraestructura en México, explicó que los recursos públicos orientados al desarrollo de infraestructura se concentran en los proyectos insignia del gobierno federal, tales como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, el Tren Maya, Tren Interoceánico, Refinería Olmeca en Dos Bocas, Tabasco, y la conservación de caminos rurales.
El directivo resaltó que pese a estos proyectos, la administración pública federal no cuenta con los recursos, ni con la capacidad suficiente para realizar por sí sola todos los proyectos de infraestructura y la inversión en México está lejos del 25 por ciento del producto interno bruto (PIB) que se debería orientar a este rubro.
Por ello, apuntó, se necesita certidumbre jurídica para impulsar proyectos de inversión de largo plazo y si bien el gobierno federal anunció dos paquetes de infraestructura y eso fue una buena señal para el mercado, aún está pendiente un tercer paquete, pero muchos de estos proyectos están en etapa de planeación.
Pese a este contexto, Ballinez aseveró que en las empresas hay apetito por financiamiento, ya que quieren incrementar inventarios que tuvieron una contracción en los años del covid-19 y también para financiar proyectos que se detuvieron por la pandemia o para refinanciar deuda.
“Este tema que se relaciona con la relocalización de las cadenas de suministro y cadenas productivas, el nearshoring, México tiene la posición geográfica ventajosa y la disponibilidad de mano de obra calificada que puede ser un elemento fundamental para atraer inversión privada nacional y también de fuera del país”, dijo.
Sin embargo, aclaró, para atraer inversión, además de generar un clima de negocios favorable, indicadores macroeconómicos estables, algo muy importante es que se requiere una oferta de energía confiable y accesible y es algo en lo que se tiene que poner mucha atención para atraer nuevas inversiones que tienen que ver con la relocalización de las cadenas de suministro.
AMP