La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) envió una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador con su propuesta de Salario Solidario, a fin de proteger a las empresas ante la parálisis económica a causa de la pandemia del coronavirus.
El titular del organismo empresarial, Gustavo de Hoyos, detalló que esta propuesta de ponerse en práctica sería tripartita, es decir, funcionaría con las aportaciones tanto del gobierno federal, los patrones y de los trabajadores, mientras que podría ser financiada mediante mayor deuda pública.
- Te recomendamos Coparmex pide a gobierno reactivar sector automotriz pese a covid-19 Negocios
“La carta que hemos presentado esta mañana en la oficina del Presidente de la República, donde hemos solicitado que implemente la medida del Salario Solidario, le presentamos una explicación detallada de cómo podría llevarse a cabo y le reiteramos para que como jefe del estado mexicano haga una convocatoria al acuerdo nacional”, indicó.
La Coparmex explicó que Salario Solidario funcionaría si el gobierno aporta 50 por ciento del salario de los trabajadores afectados, siempre y cuando ganen hasta tres salarios mínimos, y que las empresas aportarían el otro 50 por ciento.
“En el caso del gobierno la propuesta es que el apoyo vaya en el caso de los trabajadores de uno a tres salarios mínimos, cubrir el 100 por ciento, esto significa que el 50 por ciento lo paga el patrón y 50 el trabajador, y que progresivamente vaya disminuyendo, donde el gobierno la máxima ayuda será equivalente a tres salarios mínimos”, indicó el organismo.
Agregó que en el caso del patrón, empezaría pagando el 50 por ciento del salario de los trabajadores con menores ingresos, “esta contribución iría progresivamente bajando hasta llegar a 33 por ciento, lo que significa que este apoyo logremos preservar el empleo”.
Señaló que el objetivo es proteger 20 millones de trabajadores formales que están en el Seguro Social, donde de esta manera, el cálculo del costo de esta aportación por parte del gobierno, sería de 96 mil millones de pesos.
“Para la implementación calculamos, la aportación del gobierno sería entre el 0.8 y 1.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), sería el costo para preservar los empleos, en lugar de recortar empleos se puedan mantener”, destacó.
Dijo que este estimado del PIB como una primera posibilidad es adquirir deuda pública, “consideramos que adquirir deuda hasta 1.2 por ciento del PIB es manejable para las finanzas del país y se podría mantener el empleo”.
“Y la otra opción sin deuda pública, la alternativa es una reorientación del gasto público, que estos proyectos del gobierno se pospongan durante la pandemia, para efecto de que los empleos se conserven”, comentó.
kga