A pesar de que la economía mexicana enfrenta un escenario recesivo en 2020, los primeros efectos generados por el covid-19 en el mercado de telecomunicaciones se aprecian en los resultados del primer trimestre del año; sin embargo, las mayores afectaciones para la economía y la industria todavía no se observa, de acuerdo con un análisis de The Competitive Intelligence Unit (CIU).
La consultora destacó que a diferencia del dinamismo de los ingresos móviles, que crecieron anualmente 11.8 por ciento, las líneas móviles registraron un alza más moderada, al aumentar solo 2.8 por ciento. En tanto, el valor del segmento móvil alcanzó 74 mil 45 millones de pesos, gracias al alza de 18 por ciento en ingresos por venta de equipos y de 9.1 en servicios.
Durante el trimestre se contabilizaron 123.8 millones de líneas, para una penetración de 97.8 líneas de servicio por cada 100 habitantes, lo que aproxima al país al emblemático, pero evasivo, coeficiente de penetración móvil de ciento por ciento, que se había previsto alcanzar en el primer semestre del año.
Del total de líneas, 81.8 por ciento corresponde al subsegmento de prepago y 18.2 por ciento al de pospago.
El segmento móvil medido en líneas se reconcentró ligeramente, de forma que Telcel elevó su participación de mercado de 61.9 por ciento en el cuarto trimestre de 2019 a 62.4 por ciento en el primero de 2020.
De manera anual, indicó la consultora, se aprecia una ligera desconcentración del agente económico preponderante (Telcel), al mostrar una disminución en la cuota de mercado de 0.4 puntos porcentuales.
The CIU indicó que en los últimos dos años, el segmento móvil registró un proceso de reconcentración de mercado en ingresos en favor de Telcel, pues el operador muestra una escalada en su participación medida por los ingresos registrados.