En 2018, el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos ascendió a 22 mil 186 millones de dólares, lo que representó 1.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), cifra superior al déficit de 1.7 por ciento registrado en 2017, en un contexto de elevada incertidumbre y debilitamiento de la economía mundial.
- Te recomendamos Minuta de Banxico revela preocupación por desabasto de gasolina y bloqueos Negocios
De acuerdo con la información publicada por el Banco de México (Banxico), el resultado de la cuenta corriente se derivó de aumentos en los déficits de la balanza comercial petrolera y de la cuenta de ingreso primario, los cuales fueron parcialmente compensados por incrementos en los superávits de la balanza de mercancías no petroleras, de la cuenta de viajes y de la cuenta de ingreso secundario, derivado de ingresos por remesas que continuaron ubicándose en niveles elevados.
Al interior de la balanza de pagos, la cuenta financiera registró en 2018 un endeudamiento neto que implicó una entrada de recursos por 35 mil 909 millones de dólares.
Dicho saldo se debió a la combinación de endeudamientos netos de 24 mil 746 millones de dólares por concepto de inversión directa y de 15 mil 226 millones de dólares en el rubro de inversión de cartera; de préstamos netos al resto del mundo de 401 millones de dólares en el renglón de derivados financieros y de 3 mil 178 millones de dólares en el rubro de otra inversión; y de un aumento en los activos de reserva de 483 millones de dólares.
Para 2019, el Banxico no descarta episodios de volatilidad, ya que las perspectivas de la economía mundial para este año y 2020 se revisaron a la baja y prevalecen riesgos importantes, destacando la incertidumbre sobre las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, el proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea, la posibilidad de que se observe un crecimiento de China menor al esperado y un escalamiento en las tensiones políticas y geopolíticas en distintas regiones.
GGA