Ocho personas demandaron el martes al fabricante del aceite en aerosol para cocinar Pam, argumentando que sufrieron quemaduras graves después de que explotaron las latas.
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El abogado de los demandantes, J. Craig Smith, dijo que algunos de los contenedores más grandes de Pam y aerosoles similares para cocinar hechos por Conagra tienen un sistema de ventilación defectuoso en la parte inferior que los hace más propensos a explotar.
Una de las víctimas dijo que el fuego fue tan intenso que quemó su lente de contacto del ojo derecho, causándole una ceguera casi total.
Las latas con el sistema de ventilación son de 295 mililitros o más, no las de 177 mililitros que generalmente se venden en los supermercados.
Las latas más grandes suelen encontrarse en las tiendas de almacén como Costco, Walmart y Amazon. Una de las querellas fue presentada por un cocinero que utilizó el aerosol para cocinar de la marca Sysco en un restaurante de Texas.
Conagra, con sede en Chicago, dijo que el sistema de ventilación se utilizó en un número “limitado” de latas, pero que fue eliminado durante un rediseño del producto a principios del año. El rediseño no estaba relacionado con las demandas y fue parte de una labor para estandarizar las latas de la compañía, señaló Conagra.
La empresa agregó que Pam y otros aerosoles para cocinar tienen etiquetas de advertencia claras en la parte delantera y trasera de que el producto es inflamable y no debe dejarse sobre o cerca de una estufa o fuente de calor. El aceite en aerosol no debería almacenarse en un sitio con más de 48 grados Celsius o ser rociado cerca de una llama, explicó la compañía.
Smith interpuso el martes seis demandas en el tribunal de circuito del condado de Cook, en Illinois. Dos de las querellas representan a parejas que resultaron heridas mientras cocinaban juntos.
nerc