A pesar de que este nuevo ciclo escolar 2022-2023 será totalmente presencial, la inflación y la deserción que se presentó durante la pandemia hará que la venta de útiles y artículos escolares aún esté 20 por ciento debajo de lo reportado en 2019, considera Diego Céspedes, presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Artículos Escolares y de Oficinas (Anfaeo).
En entrevista con MILENIO explicó que este año será mejor que 2021, pero si les impactó una baja de hasta 10 por ciento en la matrícula escolar, que actualmente es cercana a 33 millones de alumnos, lo que limita regresar a los niveles previos a la emergencia sanitaria.
“Ya empezó un movimiento fuerte en la demanda. Al cierre de julio inició la oferta al menudeo de forma muy importante y esperamos que esto continúe fuerte hasta los primeros 10 días de septiembre; históricamente, esta se incrementa entre 10 y 15 días antes del regreso a clases, que este año se realizará el 29 de agosto”, sostuvo Céspedes.
Padres gastarán más
La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) estima que el costo de los artículos escolares básicos (entre ellos útiles, uniformes y mochilas) en comparación con el año anterior aumentó 30 por ciento en la zona norte del país, 20 por ciento en el centro y 10 por ciento al sur.
“Este próximo regreso a clases, como consecuencia del incremento en precios, los padres de familia no surten las listas completas. También se promociona la cultura del reciclaje, pero más que por un bien social lo hacen por ahorrar”, explicó Cuauhtémoc Rivera, presidente de Anpec.
Agregó que no se debe olvidar que el valor del papel en todo el país aumentó casi 50 por ciento, afectando a todos sus derivados.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), entre julio de 2019 y el mismo mes de este año, el costo de útiles escolares en el país subió en promedio de 20.4 por ciento.
Solo en cuadernos se muestra un aumento de 14.2 por ciento, mientras que los libros de texto subieron 11.7 por ciento.
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Ciclo escolar irregular
Diego Céspedes de Anfaeo destacó que el sector resintió la permanencia de un ciclo escolar irregular y un periodo vacacional corto durante este año, que da un menor tiempo para planear el siguiente regreso a clases.
“La inflación no es algo exclusivo de México, por eso es que los gobiernos están tratando de incrementar las tasas de interés, con el fin de influir en el consumo, esto también e refleja en la demanda de artículos de escuela y oficina”, señaló.
Hace unos días la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco) estimó que las ventas esperadas en los comercios de la capital del país por el regreso a clases serán aproximadamente de 3 mil 54 millones de pesos.
El presidente del organismo, José de Jesús Rodríguez, manifestó que el regreso a clases se llevará a cabo con normalidad de forma presencial, respetando todos los protocolos de seguridad y sanidad establecidos por el gobierno federal para evitar un repunte en contagios.
Producción
Diego Céspedes de Anfaeo de indicó que el segmento de exportación padeció menos que el mercado nacional, toda vez que naciones como España y Brasil cerraron alrededor de 60 días sus actividades en escuelas, lo cual ayudó a la producción mexicana.
Datos de Inegi muestra que se fabricaron al primer semestre de 2022 en México 48.7 millones de plumones, plumines y marcadores de texto, 115.8 por ciento superior a lo registrado en igual periodo del año pasado.
Igual sucedió con la manufactura de papel bond, utilizado en cuadernos y libros, que llegó a 216 mil 279 toneladas entre enero y junio de este año, 23.8 por ciento mayor a lo reportado en el mismo lapso de 2021.
La producción de crayones subió 39.1 por ciento y 10.9 por ciento la manufactura de las carpetas de argollas.
A pesar de ello, el presidente de Anfaeo sostuvo que la industria está presionada por el encarecimiento en sus operaciones, con un aumento en el costo de logística hasta cinco veces mayor; y de hasta 80 por ciento en materias primas; mientras que la mano de obra subió 70 por ciento en los últimos tres años.
Según Céspedes “los fabricantes bajamos márgenes dados los costos que hubo y el incremento de precios de 15 y 30 por ciento”.
“No vemos hoy un sacrificio de unidades, pero sucede que hay una búsqueda en marcas de útiles más económicos”, aseguró el líder gremial.
En el mercado interno, Cuauhtémoc Rivera, de Anpec, indicó que aproximadamente 80 por ciento de los comercios dedicados a la venta de papelería se encuentra vendiendo inventario que tenía rezagado a causa del cierre de sus negocios, que fue provocado por la pandemia de covid-19.
El 20 por ciento restante lo conforman los establecimientos que surtieron con artículos nuevos sus negocios y aquellos que decidieron comenzar a emprender con una papelería.