Deshacerse de las deudas es unos de los propósitos más comunes cada año, pero debido a circunstancias que muchas veces escapan de nuestro control, a veces es imposible saldarlas, y ante esto, tu institución financiera podría valerse de algunos métodos para exigir su pago, por lo que es posible que algunos de ellos te llamen, o bien, sea un despacho de cobranza quien te invite a ponerte al día.
¿Qué es un despacho de cobranza?
Los despachos de cobranza son contratados por las entidades financieras para realizar la gestión del cobro de sus créditos, préstamos o financiamientos, entre la cual destaca su denominación o razón social, domicilio, teléfonos y correo electrónico utilizados para realizar sus gestiones.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), para que estos despachos ejerzan su función, deben acatar ciertas reglas, incluyendo los horarios en los que pueden llamarte; es decir, no pueden marcarte antes de 7:00 horas o después de las 22:00 horas.
Obligaciones de los despachos de cobranza
- Dirigirse al deudor de manera respetuosa y educada.
- Comunicarse o presentarse en un horario de 7:00 a 22:00 horas.
- Documentar por escrito con el deudor el acuerdo de pago, negociación o reestructuración.
- Entregar a la entidad financiera los documentos que contengan los acuerdos referidos.
Lo que no deben hacer
- Utilizar nombres o denominaciones que se asemejen a las de instituciones públicas.
- Utilizar números de teléfono que aparezcan en el identificador de llamadas como "confidencial", "oculto “ o "privado".
- Amenazar, ofender o intimidar al deudor, sus familiares, compañeros de trabajo o cualquier otra persona que no tenga relación con la deuda.
- Enviar documentos que aparenten ser escritos judiciales u ostentarse como representantes de algún órgano jurisdiccional o autoridad.
- Establecer listas negras, cartelones, o anuncios, que hagan del conocimiento del público la negativa de pago de los deudores.
AMP