Las constructoras en Tamaulipas comenzaron el 2022 con una reducción en la actividad, reflejado en una caída de 29 por ciento mensual en sus ganancias en enero, al registrar 806 millones de pesos. Además, se muestra la baja en el valor de la producción a diferencia del mismo periodo del 2021.
Al primer mes del año, el Centro de Estudios Económicos (Ceesco) de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), informó que sus afiliados en la entidad presentaron reducciones relevantes por la falta de proyectos de infraestructura de los gobiernos y se arrastró ante la carencia en los planes de la iniciativa privada.
“Durante enero de 2022, la facturación de las empresas constructoras en Tamaulipas acumuló 806 millones de pesos corrientes, una disminución en términos reales de 33.8 por ciento con relación al mismo mes de 2021, mismo caso en relación al mes previo con 29 por ciento menos”, expuso el estudio.
Ese desempeño, destacó el evaluador, fue lastrado por un desplome de 100 por ciento en obras hidráulicas, como en otras construcciones con menos de 71.2 por ciento. Las actividades para conducción de gasolinas y gas e instalaciones petroquímicas, transporte y urbanización, en generación y distribución de electricidad e infraestructura en telecomunicaciones, también registraron caídas.
Mayor actividad privada
Solo los trabajos en edificación de vivienda, industrial, comercial y servicios registraron recuperaciones, De ahí, en este periodo el 86.8 por ciento de los planes realizados en el estado fue mediante inversión privada, con un valor de 700 millones de pesos y el restante 13.2 por ciento con recursos públicos, que alcanzaron los 106 millones de pesos.
Referente a las fuentes laborales, el número de afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el sector de la construcción tamaulipeca tuvo una disminución de uno por ciento con relación al mismo periodo de 2021, es decir, se perdieron 414 empleos formales. Con este resultado, aportó el 2.4 por ciento de los puestos a nivel nacional.