Guillermo Ortiz, ex gobernador del Banco de México y ex Secretario de Hacienda y Crédito Público, señaló que es probable que en 2023 se registre una desaceleración en México, debido a un menor crecimiento en Estados Unidos, pero aseguró que una recesión es evitable.
“Seguramente habrá una desaceleración, pero yo creo que la recesión es evitable”, dijo al margen de su participación en el “Seminario de Perspectivas Económicas del ITAM, 2023”.
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Ortiz explicó que los bancos centrales han hecho un alza sincronizada y sin precedentes en la tasa de interés ante el brote inflacionario, causado por disrupciones por la pandemia y en las cadenas productivas, así como por un incremento muy importante en los apoyos fiscales y monetarios en los países desarrollados.
“Esto ha tenido algunos beneficios para México en términos de sus exportaciones, en términos de remesas y yo creo que esa tendencia se va a desacelerar en 2023 porque después del apretón de la política monetaria, tiene rezagos, no se dan las consecuencias de manera inmediata, sino que tienen rezagos importantes. Será en 2023 cuando se van a sentir los efectos de condiciones monetarias más restrictivas”, dijo.
El ex funcionario abundó en que la mayor parte de los analistas y de organismos internacionales está previendo una desaceleración importante en la economía mundial y se habla mucho de una recesión.
“Yo creo que en Estados Unidos, la probabilidad de que ocurra una recesión no es más de 50 por ciento y es posible que se dé hasta 2024 porque todavía la fortaleza del mercado laboral y el hecho de que los balances de las familias estén en buen estado, que todavía tengan ahorros excesivos, hace que la economía norteamericana sea más resiliente”, comentó.
En el caso de México, agregó Guillermo Ortiz, seguramente se va a reducir el ritmo de crecimiento de exportaciones, las remesas no van a crecer a las tasas que venían creciendo, pero probablemente se mantendrá el ritmo de las remesas que ya representan 4.5 por ciento del producto interno bruto (PIB).
srgs