En manos del presidente del Colegio de Abogados Mexican American Bar Association (MABA), José Cesar Yañez Magdaleno, Enrique Michel Velasco, propietario de Dulces de la Rosa, quien a su vez fue invitado para formar parte de dicha asociación como miembro honorífico, recibió la medalla Premio Anual MABA México 2019, hecha con plata pura y bañada en oro de 18 quilates, teniendo como escenario el Salón de Plenos del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco.
La lectura del acuerdo del Consejo Directivo que fundó y motivó el otorgamiento de dicha distinción, estuvo a cargo de la maestra, Jeanett Leticia Carrillo Magdaleno, quien expuso que dicha presea tiene como objetivo reconocer la trayectoria jurídica, profesional, académica, humana o de apoyo a la sociedad en el ámbito público o privado. En sesión del Consejo Directivo de este Colegio, se aprobó entregar este reconocimiento a Michel Velasco, “por su vocación y entrega con las causas sociales en favor de los que menos tienen, así como por ser un empresario promotor de la generación de empleos y el desarrollo económico para nuestro estado, en beneficio de los más altos intereses de la sociedad mexicana”.
Además de recibir la medalla MABA México 2019, también le fueron otorgados un reconocimiento honorífico y un “Mazo de la Justicia”, símbolo que representa el ejercicio profesional por los principios de rectitud, integridad y las causas justas, entregado de manera simbólica para invitarle a continúe desarrollándose en la sociedad y como se pudo leer en el decreto de reconocimiento: “Este premio es otorgado por ser un excelente ser humano; por su trayectoria en el ejercicio público, privado, en el sector económico y desarrollo en el estado de Jalisco así como por sus merecidos reconocimientos por las acciones que realiza en favor de la sociedad”.
Por su parte, el galardonado, manifestó estar consciente del compromiso que representa apoyar a sectores vulnerables como los migrantes y de la desigualdad que impera actualmente y agregó: “Para nosotros es muy importante la gente que rodea a la empresa Dulces de la Rosa, en donde todos saben hacer su trabajo y que no regatean absolutamente en ningún esfuerzo para tener la calidad y la cantidad que se requiere; ahora le doy gracias a Dios y a mi gente que me dan algo de tiempo para poder ayudar, porque se necesitan liderazgos para que realmente nosotros reaccionemos y nos demos cuenta de que el mundo está siendo dañado; tenemos la capa de ozono, los ríos contaminados y el cambio climático. Lo mínimo que podemos hacer todos los ciudadanos es sembrar un árbol y cuidarlo, el mundo es la casa de la humanidad y debemos tratarlo con mucho cuidado y con mucho cariño”.
Hijo de Jesús Michel González y de Elvira Velasco Rolón, Enrique Michel, fue el séptimo de 13 hijos y ha dedicado su vida a lo que desde que era un niño, vivió dentro de su entorno familiar, producir los Dulces de la Rosa.