Entorno internacional complica escenario presentado en Precriterios 2023: Hacienda

La dependencia dará seguimiento al contexto global, pero la disciplina fiscal se mantendrá.

En México la inflación continúa registrando niveles elevados. (Foto: Shutterstock)
Silvia Rodríguez
Ciudad de México /

La Secretaría de Hacienda advirtió que el contexto internacional complica el escenario presentado el pasado mes de abril en los Precriterios para 2023, caracterizado por la permanencia del covid-19, la guerra en Ucrania y un entorno inflacionario; no obstante, aseguró que las finanzas públicas son sólidas y no habrá un impacto presupuestal.

“Probablemente (el entorno externo) va a tener un efecto en el desempeño económico nacional y también en las revisiones que vamos a hacer de las finanzas públicas, no me quiero adelantar, pero es por cómo estamos viendo las condiciones, y las condiciones actualmente han cambiado, con respecto a lo que presentamos en abril”, refirió el titular de la Unidad de Planeación Económica de la dependencia, Rodrigo Mariscal.

Durante la conferencia Criterios generales de política económica. Entorno económico y fiscal de México, en el marco de la Cátedra SHCP 2022, organizada por la Facultad de Economía de la UNAM, señaló que en el primer trimestre del año se registró un repunte adicional de contagios de ómicron en diversos países, incluido China, principal productor de semiconductores y caracterizado por su política de tolerancia cero.

Además, añadió el funcionario, persisten problemas logísticos para el transporte de mercancías en los principales puertos del mundo y en las cadenas de suministro globales, que se han visto más afectadas por las tensiones geopolíticas, mientras que el volumen de exportaciones presenta caídas en Estados Unidos y desaceleración en China.

A esto se suma, abundó, otro choque de oferta extraordinario, la guerra entre Rusia y Ucrania, pues ambos países son productores estratégicos de materias primas, aluminio y alimentos; así, el conflicto trajo consigo un aumento significativo de los precios de algunas materias primas.

En este contexto, apuntó Rodrigo Mariscal, el nuevo escenario económico global se ha deteriorado como resultado de los choques acumulados, que se han reflejado en una menor demanda y en una menor producción industrial, por lo que los pronósticos de crecimiento se han revisado a la baja tanto para 2022, como para 2023, a esto se añade un crecimiento heterogéneo que ya se observaba previamente a raíz de la pandemia.

Inflación

En este escenario, agregó, los componentes energéticos y alimenticios continúan contribuyendo fuertemente a las presiones internacionales de precios, afectados por el crecimiento de precios internacionales de materias primas y disrupciones en las cadenas de suministro.

En consecuencia, indicó el titular de la Unidad de Planeación Económica de la Secretaría de Hacienda, en México la inflación continúa registrando niveles elevados, en relación con su distribución histórica, y las expectativas se han incrementado, aunque se mantienen dentro del rango estimado por el Banco de México, por lo que el mercado estima que el banco central seguirá elevando su tasa de interés para anclar las expectativas y tratar de contener la inflación.

Destacó que la medida implementada en materia de estímulos a los combustibles llevó a que en marzo la inflación general estuviera dos puntos porcentuales por debajo de lo que hubiera estado sin los subsidios a los combustibles; esto es en vez de haber sido de 7.5 por ciento, habría sido de 9.5.

Finanzas públicas estables

Pese a este escenario, el funcionario aseguró que las finanzas públicas se mantendrán estables y dentro de los parámetros establecidos, debido a que si bien si el gobierno federal está dando un estímulo a los combustibles para contener las presiones inflacionarias, esto se verá compensado por mayores precios del petróleo, “en términos de las finanzas públicas, no va a haber un impacto presupuestal”, aseveró.

Mariscal aseveró que la disciplina fiscal garantiza la sostenibilidad de las finanzas públicas y se prevé que la deuda pública como porcentaje del Producto Interno Bruto se mantenga alrededor de 50 por ciento.

De cara a lo que va a venir en 2022 y el paquete que vamos a presentar, lo que vamos a ver es que en términos de los balances primarios y los déficits, vamos a seguir con una política de control del gasto y de presentar resultados financieros en línea con las metas que establece la ley, de tal manera que en 2023 esperamos tener superávit primario”, dijo.

KL/AMP

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