La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) ve probable que el crecimiento económico del país en 2018 se ubique en la parte inferior del rango previsto, que es de 2 a 3 por ciento, al tiempo que ajustó al alza sus expectativas de inflación para el cierre de este año, de 4 a 4.25 por ciento.
De acuerdo con la minuta de la última reunión de política monetaria, donde la Junta de Gobierno del Banxico decidió mantener en 7.75 por ciento la tasa de interés de referencia, las perspectivas de crecimiento obedecen a la debilidad mostrada en el segundo trimestre del año y a la perspectiva de que la inversión continúe débil.
No obstante lo anterior, la mayoría de los miembros de la junta señaló que se mantiene la previsión de un fortalecimiento para 2019, aunque algunos indicaron que se anticipa un entorno de mayor incertidumbre el próximo año, misma que se relaciona con riesgos globales, pero también con el futuro de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y el de la relación bilateral con Estados Unidos, así como con la posibilidad de que la plataforma de producción petrolera continúe significativamente por debajo de lo programado en lo que resta de 2018 y con la incertidumbre respecto a las estrategias, políticas y planes que llevará a cabo la nueva administración.
Entre los riesgos para el crecimiento potencial de mediano y largo plazos, uno de los miembros de la junta notó la posible modificación de la postura fiscal por parte de la nueva administración, así como el deterioro en las condiciones de acceso del país al comercio internacional.
Los miembros de la junta añadieron que en los próximos meses un elemento crucial para la preservación de una política macroeconómica sólida serán las acciones en materia de finanzas públicas que anuncie y lleve a cabo la próxima administración federal; específicamente en el corto plazo, es indispensable disipar posibles dudas sobre la congruencia entre algunas de las iniciativas contempladas y el fortalecimiento de la posición fiscal.
Asimismo, también será importante tomar acciones para asegurar la solidez de las finanzas públicas en el largo plazo, en virtud de las posibles presiones derivadas del gasto público en distintos rubros como los pagos de pensiones, el gasto en salud y el costo financiero de la deuda, a lo que podría añadirse el gasto en inversión de empresas productivas del Estado que la siguiente administración federal está contemplando.
Se informó que hacia adelante, la Junta de Gobierno mantendrá una postura monetaria prudente.
PESO GANA TERRENO POR MENORES TENSIONES GLOBALES
Gracias a una disminución en la aversión al riesgo, ayer el peso se apreció y en sucursales bancarias el dólar se vendió en un máximo de 19.45 pesos y un mínimo de 19.0385, mientras que en operaciones al mayoreo cerró en 19.077 pesos, 14 centavos menos que la jornada del miércoles.
Banco Base indicó que la recuperación del peso se debió a una disminución de la aversión al riesgo en los mercados financieros globales, luego de que China y Estados Unidos (EU) mostraron una mejor disposición para atender diferencias en temas de comercio.
Explicó que el optimismo se mantuvo, pues el presidente estadunidense, Donald Trump, señaló que ambos países están en conversaciones, mientras que Larry Kudlow, director del Consejo Económico Nacional, dijo que es bueno que China envíe al viceministro de Comercio a finales de agosto.
La sesión no estuvo exenta de amenazas, ya que el secretario del Tesoro de EU, Steven Mnuchin, dijo que están listos para imponer nuevas sanciones a funcionarios turcos si se rehúsan a liberar al pastor Andrew Brunson.