Falta de financiamiento, el gran reto para comenzar un negocio en La Laguna

Emprender un negocio propio, puede ser el comienzo de una serie de desafíos que se habrán de enfrentar antes que el proyecto alcance un óptimo nivel de maduración. Desde identificar el producto o servicio que cubra o genere una necesidad. El contar con un plan de negocios adecuado, el mantener un equilibrio entre la empresa, la familia, la escuela; enfrentar aspectos fiscales, laborales; permisos y licencias de operación, entre otros, son algunos retos que, a quererlo o no, han tenido que enfrentar aquellos que con ilusión, entran en el mundo de los negocios: en donde tomar la decisión correcta puede marcar la diferencia entre permanecer o cerrar un negocio. 

Tras un sondeo aplicado para MILENIO por medios digitales en grupos y comunidades de emprendedores de La Laguna y contestada por 46 emprendedores de Torreón y Gómez Palacio, el 45.7% coincide en señalar la falta de acceso al financiamiento como el gran reto a enfrentar al momento de querer comenzar un negocio. 

Otro de los retos que expone el 65.2% de los emprendedores encuestados hacen énfasis en la necesidad tener apoyo para tener los medios para darse a conocer. 

Esta encuesta permitió la recolección de información realizada a una muestra de 46 jóvenes emprendedores de La Laguna, quienes respondieron esta encuesta rápida realizada con el apoyo de Juan Diego Hinojosa, quien se desempeña como director del Instituto de Emprendimiento del Tec de Monterrey. 

Y si bien fue un ejercicio sencillo realizado en línea, si mostró el sentir de una parte de los jóvenes laguneros quienes han decidido arrancar su propio negocio. Fue la semana pasada que se lanzó esta encuesta en donde se realizó una sencilla radiografía sobre el costo que conlleva para los jóvenes el ser emprendedor. Y contrario a lo que muchas autoridades aluden, es el acceso al financiamiento, el principal reto que reconocen se han tenido que enfrentar en este camino dentro del mundo empresarial. 

El segmento de la población al que fue enfocada esta encuesta fue al de los jóvenes emprendedores. En donde, el 26.1% fueron jóvenes de entre 18 a 25 años. El 17.4% fueron de 26 a 30 años de edad. En tercer lugar, con el 19.6%, fueron jóvenes de 31 a 34 años. En cuarto sitio con el 15.2%, empresarios de 35 a 40 años. Mientras que el 10.9% de los encuestados oscilaron entre los 40 a 45 años. El 8.7% contó con 45 o más años de edad. El giro de su emprendimiento o negocio es muy diverso y para identificarlo, se obtuvieron 46 respuestas; de las cuales, el 30.4% externaron que decidieron abrir su negocio en el sector comercio, el 23.9% en servicios, el 19.6% dentro del sector de restaurantes y alimentos. Mientras que el 13% abrió su negocio en el rubro de la tecnología. El resto tiene sus negocios en la industria, bienes raíces, construcción y vivienda, arte así como la elaboración, venta y distribución de diversos productos.

El mayor desafío

De esta encuesta, el 46.9% de los negocios, tienen de uno a tres años en el mercado, el 25% recién lo acaba de emprender al apenas cumplir un año de existencia. Solo el 21.9% tiene de seis a 10 años de iniciar su negocio. Un porcentaje mínimo tiene de 10 o más años. Para nadie es nuevo, el que el emprender o iniciar un negocio en México resulte todo un “calvario”. Y aunque las variables son diferentes de acuerdo a cada caso, el 45.7% de los encuestados refirieron la falta de acceso al financiamiento, como el principal reto que existe en sus iniciativas de negocios.

En medio de un mercado que se dice repuesto tras la crisis pandémica, la falta de ventas es lo que preocupa al 41.3% de los emprendedores que participaron en este ejercicio, y que consideran, vulnera la estabilidad de sus negocios. En tanto que al 34.8% le preocupa no encontrar el personal adecuado para atender sus negocios y el 6.5% ha sufrido el problema de la rotación de personal. 

Tomar malas decisiones al momento de emprender un negocio puede derivar en el cierre mismo de dichos proyectos antes de lo pensado. 

El 26.1% de los emprendedores reconocieron tener que enfrentar problemas por la mala administración de sus empresas. En medio del gran escaparate que representaron las redes sociales y todas las herramientas tecnológicas que cobraron importancia durante y tras la pandemia, el 65.2% de los encuestados refirieron entre sus principales preocupaciones, obtener mayores apoyos para dar a conocer sus productos y servicios. 

El 58.7% pide mayor acceso a inversión o financiamiento. El 52.2% pide además apoyo para capacitación en habilidades diversas, el 45.7% pide capacitación en tecnología.

El 43.5% pide ampliar su red de contactos mediante reuniones de networking. Solo el 19.6% pide apoyo para incursionar en el mercado exterior, con la importación y exportación de productos, aunque esto puede ser un trayecto mucho más complejo.

La tendencia

Juan Diego Hinojosa Sandoval, director del Instituto de Emprendimiento del Tecnológico de Monterrey, Campus Laguna, aseguró que dentro de las pequeñas y medianas empresas, ofrecen diferentes propuestas de negocios ya que buscan atender las necesidades del mercado. 

Sin embargo reconoció que se debe trabajar en desarrollar soluciones con un enfoque hacia la innovación tecnológica, siendo así el camino en dónde los emprendedores mexicanos pueden ir trabajando. 

Señaló que la digitalización, ha sido uno de los principales cambios que generó la pandemia en el emprendimiento y reconoció que la adopción digital acelerada ha detonado que más emprendedores lo consideren como negocio, de ahí que el Tec de Monterrey, ha adaptado sus programas para reforzar las habilidades digitales de su comunidad de emprendedores, así como de las pymes para estar inmerso en el mundo digital, incluso más allá de las redes sociales: 

“No se trata únicamente de estar en redes sociales o abrir una página web, se trata de hacer una estrategia que te permita ser competitivo; por lo que se busca apoyar este tipo de proyectos”. 

A partir de la pandemia se ha visto un auge importante en el emprendimiento digital basado en redes sociales, e-commerce, así como iniciativas basadas en tecnologías digitales como plataformas o aplicaciones móviles. 

Si bien reconoció que continúan los negocios tradicionales como cafeterías, restaurantes, bares o comercios, que se les apoya en aspectos de innovación, se ha visto un crecimiento mayor a las tendencias digitales. 

Conceptos de “emprendimientos sociales”, han ido madurando entre el mercado de los nuevos negocios, dijo que hay una importante colaboración entre la empresa y la academia, para empujar estas iniciativas a sectores vulnerables.

Razones para emprender

A decir del joven empresario Homero del Bosque, presidente del Capítulo de Jóvenes Industriales de Canacintra Gómez Palacio, se han identificado varias razones por las que los jóvenes toman la determinación de incursionar en los negocios. 

Con 23 años de edad y graduado de la carrera de Ciencias Políticas por la Universidad de Las Américas en Puebla, lamenta que el emprendimiento tenga un camino complejo que deja a muchos jóvenes en el camino. 

“Los jóvenes emprenden por varias razones principales: Por los bajos sueldos y la falta de trabajo; y porque no les gusta su carrera que estudiaron. Pero lamentablemente emprenden con mucha desinformación”.

Comentó que los jóvenes están emprendiendo en áreas como Comunicación con la apertura de agencias de marketing, diseño, publicidad, tecnología y los medios de comunicación, pero en donde los jóvenes quieren ser influencers. O inician sus negocios abriendo restaurantes y negocios de comida rápida y bares. Ventas en línea a través de las redes sociales, Tik Tok. 

El empresario de 23 años de edad reconoció que emprender, es un proceso de continuo aprendizaje, en donde se tendrán que enfrentar con abrir un negocio en medio de una gran crisis económica, en donde el precio de todos los productos están subiendo, se tiene que pagar impuestos y Seguro Social, permisos municipales, la carga fiscal, el pago de nómina, pago de equipo de trabajo, publicidad, aunado a la triste economía del país y los altos precios de la Canasta Básica”. 

Para Homero del Bosque, la problemática que viven los jóvenes es muy compleja. 

Destacó que se han identificado diferentes retos para las nuevas generaciones: La alta rotación de personal joven en las empresas ubicadas en la zona Norte del país. De ahí que ya sea complicado que este segmento de la población encuentre empleo en las empresas, por el costo que conlleva capacitarlos para que solo duren un corto tiempo y decidan luego migrar a otra buscando mejores condiciones. 

Refirió que en La Laguna hay una gran cantidad de universidades, cuyos egresados lamentablemente no trabajan en lo que estudiaron, y que cuando son contratados, la inestabilidad laboral por rotación es la constante. 

Otro problema que identifica en los jóvenes, es la falta de interés en aspectos como la situación del país, en general, no se interesan en temas como política, ni empresarial, deporte, cultura, viviendo en lo que refirió como una burbuja, una zona de confort.

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