A pesar de los incrementos en los flujos de remesas registrados en los que va del año, los hogares en México recibieron 9.7 por ciento menos dinero en términos reales durante abril.
De acuerdo con BBVA México, esto se debió a dos factores: la apreciación del peso frente al dólar y la inflación, que presentó un aumento de 6.3 por ciento durante este mismo periodo.
En el cuarto mes del año, el Banco de México reportó que llegaron al país 5 mil 3 millones de dólares por remesas familiares, lo que representó un alza de 6.3 por ciento en comparación al mismo mes del año pasado.
Para el envío de estos recursos se cuantifican 13.1 millones de transacciones, 8.8 por ciento más respeto a abril 2022 y con una remesa promedio que ascendió a 382 dólares.
El grupo financiero detalló que del total de las remesas que ingresaron a México, 99 por ciento fueron enviadas por transferencias electrónicas, mientras que 0.2 por ciento fue a través de giros postales o bancarios (money orders) y el restante 0.8 por ciento fueron en especie y en efectivo.
Con base en dicha información, las remesas acumulan una racha de 36 meses con crecimiento ininterrumpido, que inició desde el pasado mes de mayo de 2020, de acuerdo con BBVA.
Señaló que durante los primeros cuatro meses del año las remesas sumaron 18 mil 974 millones de dólares, lo que representó un aumento de 10.1 por ciento comparado el mismo periodo del año pasado, cuando ingresaron 17 mil 230 millones de dólares.
Ante dicho panorama, el banco proyectó que las remesas al país continuarán su senda de crecimiento, pero a un ritmo más moderado que lo reportado en los dos años previos.
“Si se mantienen las condiciones económicas actuales en Estados Unidos, estimamos que las remesas podrían tener una tasa de crecimiento ligeramente inferior a 10 por ciento, es decir, crecerían a un solo dígito”, indicó.
Sin embargo, México reportó una contracción en su tasa de crecimiento en abril, siendo de 6.3 por ciento, la más baja de los últimos cinco meses, aún así, su desempeño en ese mes fue mejor que el observado en El Salvador y en Guatemala, que reportaron aumentos en dólares de 2.5 y 2.3 por ciento en términos anuales, respectivamente.
Con base en información recopilada de diversos bancos centrales de América Latina y el Caribe, se observó que las remesas a los principales países de la región ralentizaron su crecimiento en el cuarto mes del año.
Por lo que el banco explicó que esta sincronía en el flujo de las remesas en la región debido a factores en común, como el dinamismo económico y el volumen de migrantes en Estados Unidos.
AMP