Un trimestre difícil para las compañías de energía eólica más grandes del mundo, le restó brillo a varias de las favoritas de energías renovables en medio de una creciente venta de acciones de energía limpia.
Muchos sufrieron caídas en el valor de las acciones en las últimas semanas después de las malas noticias en los resultados del primer trimestre del año, entre ellas daños inesperados en el cable para Oersted, la pérdida de utilidades de Vestas, y una disminución en la proyección de ganancias de Siemens Gamesa.
Las compañías de energía solar y eólica se encuentran entre las que tuvieron mejor desempeño en el mercado bursátil el año pasado, desafiando la agitación de la pandemia en el mercado de energía más general gracias, en parte, a los compromisos sobre el cambio climático de los gobiernos y los grandes ingresos en nuevos fondos cotizados en bolsa de ETF especializados en energía limpia.
Los analistas dicen que el sector se normaliza después de las grandes ganancias del 2020. “Cuando vuelas realmente muy alto, puedes caer mucho, ellos realmente estuvieron muy alto el año pasado”, dijo Casper Blom, analista de ABMG Sundal Collier. “Probablemente hay una recalibración en marcha”, añade.
El descenso se produce en medio de una caída más amplia de las acciones de energía limpia en los últimos tres meses, que los analistas atribuyen a los temores sobre la rentabilidad, el aumento de las tasas de interés y el incremento de la competencia.
Mientras tanto, los ingresos a los ETF de energía limpia se desaceleraron en los últimos meses, y las capitalizaciones de mercado de los fondos cayeron 26 por ciento desde su punto máximo de febrero, según el análisis de 10 grandes ETF de energía limpia que realizó Berenberg.
Los 10 fondos reportaron ingresos de 13 mil 700 millones de dólares (mdd) en los últimos 12 meses, principalmente a finales del año pasado y principios de este año, pero las salidas aumentaron en los últimos dos meses.
“Los flujos de los ETF fueron uno de los motores de los fuertes precios de las acciones en la bolsa el año pasado, y estos tal vez se desaceleraron”, dijo Henry Tarr, analista de Berenberg. “Los flujos hacia la energía limpia son más neutrales en este momento”.
Las preocupaciones sobre la rentabilidad y la competencia también aumentaron para varias de las acciones más grandes de energía limpia, que normalmente operan a múltiplos mucho más altos que el resto del sector energético.
El Dato...26%
Cayeron los ingresos del ETF de energía limpia en los últimos meses
El precio de las acciones de Orsted, el mayor desarrollador de parques eólicos marinos del mundo, cayó 35 por ciento desde su pico de enero, incluyendo una caída este mes después de que la compañía reportó costos inesperados por daños en cables submarinos y utilidades trimestrales por debajo de las esperadas.
Marianne Wiinholt, directora financiera de la compañía, dijo que las rocas colocadas en la base de los cimientos de las turbinas están raspando algunos cables submarinos, un problema que podría afectar hasta 10 parques eólicos.
Se espera que el costo de las reparaciones del cable sea de aproximadamente 490 mdd, y la mayoría de los desembolsos se realizarán en 2022 y 2023.
Orsted también se enfrenta a la creciente competencia de las compañías de energía que se están acumulando en la fuentes eólica marina y que aumentan los precios de los derechos de desarrollo.
A medida que más empresas se mueven hacia las energías renovables, los inversionistas comienzan a tener más opciones sobre cómo invertir en esta tendencia, según John Musk, analista de RBC.
“En 2020, la temática (de energía limpia) era muy nueva y había una prisa hacia los ganadores claros de (la agenda) ESG”, dijo Musk y añade que “mientras que ahora hay una visión más equilibrada, con más competencia y más opciones para los inversionistas”.
Siemens Gamesa, que fabrica turbinas eólicas, recientemente redujo su perspectiva de ganancias para este año debido a retrasos y remisiones de proyectos.
El fabricante de turbinas rival, Vestas, mantuvo su orientación para 2021, pero los ingresos y ganancias del primer trimestre fueron peores de lo esperado.
El director ejecutivo de Vestas, Henrik Andersen, dijo que los problemas de la cadena de suministro contribuyeron a no alcanzar sus objetivos. “En el primer trimestre tuvimos más de 90 días en los que todo fue en nuestra contra”, dijo, señalando los desafíos del transporte, incluido el bloqueo del Canal de Suez.
Andersen no quiso hacer comentarios sobre el precio de las acciones de la compañía energética, que registran una caída de 23 por ciento desde su punto máximo de enero. “Si eso tiene (que ver con) algún ajuste o corrección a principios de este año, bueno, lo mejor está por venir”, señaló. “No cambia ni un centímetro de cómo manejamos Vestas”.
srgs