UBS se enfrenta a un nuevo desafío jurídico para su adquisición de Credit Suisse después de que un grupo de importantes inversionistas suizos se unió a una demanda colectiva, la última señal de la reacción negativa nacional contra el acuerdo.
Ethos Foundation, que representa a inversionistas institucionales que poseen alrededor de 5 por ciento de las acciones de ambos bancos, se sumó a una campaña liderada por LegalPass, una startup con sede en Lausana.
La adquisición, organizada por las autoridades suizas en marzo, negó a los accionistas de ambos bancos la posibilidad de votar sobre la operación. Los 3 mil millones de francos suizos (3 mil 350 millones de dólares) que UBS pagó por Credit Suisse eran menos de la mitad del valor de mercado del banco el último día de operaciones bursátiles antes de que se cerrara el acuerdo.
Los inversionistas de Credit Suisse recibieron una acción de UBS por cada 22.48 que poseían del banco en quiebra.
“Dado que (el regulador financiero) Finma decidió retirar el derecho de voto a los accionistas, la única forma de impugnar la relación de intercambio es acudir a los tribunales, como pretende hacer LegalPass”, dijo Vincent Kaufmann, director ejecutivo de Ethos Foundation.
La campaña de LegalPass, que es la primera demanda de un accionista suizo para impugnar las condiciones de la adquisición, tiene el objetivo de recuperar un pago en efectivo para los demandantes basado en la diferencia entre un valor de Credit Suisse que fijaría el tribunal y el que pagó UBS.
La demanda se suma a una creciente lista de quejas legales sobre este acuerdo. Al menos dos bufetes de abogados —Quinn Emanuel Urquhart & Sullivan y Pallas— representan a tenedores de bonos que se vieron perjudicados por la controvertida amortización de 17 mil millones de dólares de valores de nivel 1 adicionales como parte de la operación.
El personal de Credit Suisse también preguntó sobre la posibilidad de emprender acciones legales después de que también se eliminaron sus bonificaciones vinculadas a los AT1. Por su parte, los abogados de Estados Unidos trabajan en casos contra antiguos directivos de Credit Suisse por su participación en la quiebra del banco.
Las impugnaciones se producen en un momento en el que la opinión pública suiza reacciona de manera negativa contra el acuerdo de compra antes de las elecciones nacionales que se celebrarán en octubre.
Más de tres cuartas partes de los votantes que fueron encuestados quieren que el megabanco sea dividido, mientras que los parlamentarios suizos votaron contra el paquete de apoyo financiero de 109 mil millones de francos suizos subyacente al acuerdo, en un movimiento en gran medida simbólico.
UBS no respondió a la solicitud de comentarios en el momento de la publicación.
Financial Times informó el lunes pasado que los ejecutivos de UBS tienen el objetivo de dejar claro en los resultados del segundo trimestre del banco, el mes que viene, que su rescate de Credit Suisse no dependía del financiamiento de los contribuyentes suizos.