Carlos Ghosn acordó pagar un millón de dólares para arreglar los cargos de fraude con la Comisión de Bolsa y Valores de EU (SEC, por sus siglas en inglés) por acusaciones de que el ex jefe de Nissan ocultó más de 140 mdd de su paquete de remuneración.
Nissan y Greg Kelly, un ex director, también llegaron a un acuerdo con los reguladores estadunidenses, pero ninguno de los tres admite o niega alguno de los cargos que presentó la SEC.
La acción regulatoria de EU se produce en un momento crucial. Ghosn, quien fue arrestado en noviembre pasado en Tokio, se prepara para aparecer ante los tribunales el próximo año para negar varios cargos que presentaron los fiscales japoneses de que infló su pago y utilizó fondos de Nissan para obtener una ganancia personal. Los detalles del documento de la SEC se esbozan con una asertividad que parece que afectó la dura reputación de Ghosn. Pero a pesar de todas las certezas aparentes, el documento de la SEC provoca tantas preguntas como respuestas.
¿Por qué llegó a un acuerdo?
La decisión de Ghosn de llegar a un acuerdo con la SEC se basa en la esperanza de su vasto equipo legal internacional de que el hacerlo no tendría ningún impacto negativo en su juicio penal en Japón. Ghosn prometió “luchar vigorosamente” contra los cargos.
Junichiro Hironaka, su abogado, dijo el martes que una disputa en tribunales con la SEC consumiría mucho tiempo y sería costosa, y seguramente tiene razón. “Esto tiene sentido económico”, dijo Hironaka. “El señor Ghosn ahora puede concentrar su energía en defenderse (en Japón)”.
Pero esa confianza puede estar fuera de lugar. Además de prepararse para el juicio, Ghosn y su equipo participan en una batalla mediática a nivel mundial por el ámbito moral y la percepción de que es una víctima de una conspiración nacionalista japonesa.
¿La SEC halló algo nuevo?
En una demanda de 22 páginas, la SEC proporcionó más detalles de lo que los fiscales japoneses han revelado hasta el momento sobre cómo Ghosn supuestamente ocultó más de 140 millones de dólares de su paquete de remuneración. No hizo una sola acusación nueva y -una gran advertencia- llegaron a sus conclusiones, que al parecer se basan en gran medida en documentos y pruebas proporcionadas por Nissan y los fiscales japoneses, sin entrevistar a Ghosn.
Pero su momento significa que la SEC ha sido la primera en exponer los detalles granulares de uno de los cargos que enfrenta Ghosn. El regulador cita cartas y comunicación por medio de correos electrónicos con empleados de Nissan, muchos de los cuales probablemente volverán a aparecer cuando enfrente su juicio en Japón.
Sin embargo, el gran significado de la demanda de la SEC es que, por primera vez desde su arresto hace casi un año, una institución de gobierno que no es la Fiscalía del Distrito de Tokio expuso formalmente por qué cree que Ghosn estuvo involucrado en algo ilegal.
Esa conclusión afecta las afirmaciones del campo de Ghosn de que los cargos japoneses fueron inventados como parte de una conspiración para derribar a una prominente figura extranjera.
“El acuerdo con la SEC debilita las afirmaciones de Ghosn de que fue incriminado”, dijo Yasuyuki Takai, ex fiscal y ahora abogado defensor. “También tendrá un impacto en lo que se refiere a impresión de los jueces japoneses”.
Pero “ilegal” no es lo mismo que “criminal”, y los cargos que imputa la Comisión no significan que una condena para Ghosn en Japón sea la conclusión inevitable de esta trama.
¿Qué nombres faltan?
A pesar de su aparente minuciosidad en los supuestos intentos de disfrazar la remuneración de Ghosn, el documento de la SEC deja algunos huecos evidentes. Es el tipo de omisión que provocó preguntas sobre por qué él y su asesor principal, Greg Kelly, son las únicas dos personas que enfrentan cargos penales en un fraude que, por definición, tiene que haber involucrado a muchos más participantes.
En su explicación de cómo se crearon y administraron estos esquemas, la SEC incluye múltiples referencias al consentimiento y la cooperación de los “subordinados de Nissan” y los “empleados de nivel superior”.
No menciona a Hiroto Saikawa, el sucesor que eligió cuidadosamente Ghosn como jefe de Nissan, en cuyo nombre se presentaron varios años de informes anuales falsificados. Saikawa renunció a su puesto de jefe de Nissan la semana pasada después de que admitió que de manera inapropiada recibió un exceso de remuneración.
Nissan sostiene que otros ejecutivos, entre ellos Saikawa, no estaban al tanto de que se subestimó el pago porque Ghosn tenía la autoridad única para establecer la compensación del director.
¿Por qué llegó a un acuerdo?
En el centro del documento de la SEC hay una explicación de lo que impulsó a Ghosn mientras empujaba a su personal a la supuesta red de fraudes que ocultaba el verdadero tamaño de su salario.
Las reglas impuestas por la Agencia de Servicios Financieros de Japón a partir de 2010 obligaron a las empresas a revelar los salarios individuales de los ejecutivos superiores a 100 millones de yenes (1 mdd). Muchas compañías detestaron la idea, y muchos CEO se sintieron vulnerables a las críticas. Pero para Ghosn, parece que desencadenó una verdadera crisis.
“Luego de que se anunció el cambio inminente a las reglas de divulgación de Japón, a Ghosn le preocupaban las críticas que podían hacer medios japoneses y franceses si se hiciera pública su compensación”, indicó la SEC.
Esta interpretación es fundamental. Si es exacta, representa a Ghosn dividido entre dos posiciones: que sinceramente cree que había salvado a Nissan y merecía hasta el último yen de remuneración, frente a su condición de héroe público en Japón que no quería perjudicar por su codicia.
En cierto modo, la norma de la Agencia de Servicios Financieros llevó a Ghosn a tener un gran choque cultural entre él y Japón que siempre se había esforzado por evitar; sus esfuerzos por minimizar su salario pueden revelar una falta de confianza de que realmente había convencido a Japón y a Nissan de que él valía ese dinero.
Guardadito
La SEC acusó al fabricante de autos Nissan y a su ex director ejecutivo Carlos Ghosn de esconder 140 millones de dólares que debía recibir al retirarse.
Multa y castigo
Ghosn pagará un millón de dólares de multa para saldar el asunto sin admitir haber obrado mal y estará impedido por 10 años de ejercer cualquier cargo corporativo.
Daño a la firma
Nissan pagará una multa de 15 millones de dólares. Las autoridades también acusaron al ex directivo de la empresa Greg Kelly por encubrir el fraude.
Mecanismo
El mecanismo instrumentado en contratos secretos incluyó cartas antedatadas para asegurarle a Ghosn compensaciones de largo plazo y beneficios adicionales por 50 mdd.
Clama su inocencia
Ghosn aún niega haber cometido acciones inadecuadas y se dice víctima de un complot de otros ejecutivos de Nissan.