Alphabet se une a la ronda de financiamiento de 300 millones de dólares para la startup de scooters eléctricos Lime, lo que se suma a una red de acuerdos cada vez más compleja en el transporte y empresas de “ciudad inteligente” por parte de la firma de internet y Larry Page, su cofundador.
El holding de Google y Waymo invierte directamente en la startup de scooters además de que lo hace su propia división de capital de riesgo GV, de acuerdo con personas familiarizadas con el financiamiento. Anteriormente conocido como Google Ventures, GV, actúa como un fondo de capital de riesgo tradicional de Silicon Valley y encabeza la ronda de Lime.
Al inyectar una cantidad similar a la que aportó GV, Alphabet lo agrega un pequeño número de acuerdos que respalda directamente a nivel de holding, a pesar de que ya tiene otros grupos de vehículos de financiamiento interno para manejar las inversiones externas. Otras inversiones de Alphabet incluyen SpinLaunch, que desarrolla una catapulta espacial, y United Masters, que utiliza análisis de datos para reinventar los sellos musicales.
La ronda de financiamiento le da una valoración a Lime de alrededor de 800 mdd, o mil 100 millones de dólares después de incluir los fondos recaudados, de acuerdo con personas con conocimiento de los términos. Los portavoces de Lime, Alphabet y GV no quisieron hacer comentarios. Axios informó sobre la inversión de GV en Lime a principios de este mes, pero la participación adicional de Alphabet no se dio a conocer previamente.
Las inversión en dos frentes destaca la creciente complejidad en la forma como Alphabet pone a trabajar parte de su excedente de efectivo en búsqueda de su futuro crecimiento.
Tiene otro vehículo para inversiones en etapas más avanzadas, de nombre Capital IG, y Google mismo lleva a cabo inversiones directas en otras empresas. Google ya creó su propio fondo de inteligencia artificial, Gradient Ventures, el año pasado, con respaldo para el tipo de startups en etapa inicial que de otra manera esperarían obtener el dinero de GV.
La desconcertante variedad de vehículos de inversión que aparentemente se traslapan es otro ejemplo de que Alphabet no es lo suficientemente abierto con los accionistas, dijo Youssef Squali, analista de internet de SunTrust Robinson Humphrey. “Necesitamos entender la lógica de tener cuatro fuentes de inversión”, dijo.
Squali agregó que los accionistas de Alphabet mostraban un creciente interés en las llamadas otras apuestas de la compañía —el nombre que se le da a las inversiones a largo plazo en nuevos negocios más allá de Google— y que probablemente respalden la aparente proliferación de nuevos conductos de inversión.
“Definitivamente quieres que Alphabet sea agresivo para hacer grandes apuestas en el futuro, es la única manera de mantener un crecimiento por encima del promedio en el largo plazo”, dijo.