La repentina intensificación de Donald Trump en las tensiones comerciales con China sacudió los mercados mundiales el viernes, desatando una venta masiva de capitales y el aumento de la deuda de gobierno, incluso cuando los datos de empleos ofrecieron tranquilidad sobre la resistencia del mercado laboral de Estados Unidos.
El desmayo en los principales índices financieros fue impulsado por el anuncio del presidente estadunidense el jueves de que aplicaría aranceles de 10 por ciento sobre otros 300 mil millones de dólares (mdd) de productos chinos en septiembre, en una semana crucial para la economía internacional.
Pekín emitió una respuesta, y el Ministerio de Comercio de China prometió tomar represalias con “contramedidas necesarias” contra el movimiento de EU, sugiriendo que es más probable que se prepare para los aranceles de Trump, en lugar de hacer concesiones.
En un intento por proteger la expansión de EU de las tensiones comerciales y la evidencia de una desaceleración cada vez más profunda en el extranjero, la Reserva Federal de EU redujo el miércoles su tasa de interés principal en 25 puntos base por primera vez desde la crisis financiera de 2008.
Pero cuando Trump renovó sus ataques contra China, los inversores empezaron a preocuparse más por las perspectivas de crecimiento y buscaron seguridad de los bonos. Los bonos del Tesoro de EU tuvieron su mayor repunte semanal desde 2014, lo que redujo el rendimiento de referencia con vencimiento a 10 años en 20.8 puntos base en cinco días.
El rendimiento de los bonos del gobierno alemán a 30 años se desplomó hacia territorio negativo por primera vez en la historia, empujando brevemente todo el mercado de bonos gubernamentales del país hacia territorio negativo, lo que significa que los inversores que buscan seguridad estaban preparados para afrontar una pérdida garantizada al mantener la deuda hasta su vencimiento.
Las acciones recibieron un fuerte golpe. El S&P 500 de Wall Street estaba en camino de una quinta caída consecutiva con el índice de referencia con un deslizamiento de 1 por ciento en las primeras operaciones, mientras que el Nasdaq Composite cayó 1.7 por ciento. El Xetra Dax 30 de Fráncfort —hogar de una gama de importantes exportadores— cayó 2.6 por ciento. El FTSE 100 de Londres perdió 1.6 por ciento.
La reacción del mercado elevó las expectativas de que en los próximos meses la Fed tendrá que reducir más las tasas de interés más y de una manera más rápido de lo esperado.
Larry Kudlow, director del Consejo Económico Nacional, ignoró la renovada agitación en los mercados debido a la postura de Trump sobre el comercio. “No me preocupa, nuestro mercado de valores ha sido increíblemente fuerte”, dijo, y agregó que cualquier impacto en los consumidores sería “minúsculo” y que la “carga económica” van a caer “más fuerte” en China.
La confianza de Kudlow se vio reforzada por un informe de empleos relativamente fuerte para julio basado en cifras del departamento de trabajo. EU agregó 164 mil nóminas no agrícolas, en línea con las expectativas de los economistas, con cierto crecimiento en el número de empleos, de 16 mil puestos, incluso en sectores como la fabricación que son sensibles al comercio. La tasa de desempleo se mantuvo estable en 3.7 por ciento, cerca de mínimos históricos. Aunque el ritmo de creación de empleo se ha desacelerado, los economistas dijeron que no hay evidencia de un deslizamiento hacia la recesión.
“El crecimiento del empleo tiende a la baja, pero la economía aún se las arregla razonablemente bien en medio de las preocupaciones sobre un crecimiento global más débil y la incertidumbre de la política comercial”, escribió Andrew Hunter, economista de EU de Capital Economics en Londres.
La decisión de Trump de amenazar a Pekín con más aranceles se produjo después de que el presidente se decepcionó por el resultado de las conversaciones entre altos funcionarios estadunidenses y chinos. Entre sus quejas estaban la resistencia de China a comprar productos agrícolas de EU y su falta de acción para detener los flujos de fentanilo a su nación. Los aranceles propuestos de 10 por ciento sobre las importaciones chinas por 300 mil mdd se sumarían a los aranceles de 25 por ciento que ya están en marca sobre 250 mil millones de dólares de productos chinos.
S&P 500 y Nasdaq, con mala semana
Wall Street extendió una ola de ventas por el renovado temor a la guerra comercial, lo que llevó a los índices S&P 500 y Nasdaq a sus mayores descensos semanales en porcentaje desde diciembre, cuando los inversores se asustaron por la posibilidad de una recesión.
El promedio industrial Dow Jones y el S&P 500 tocaron su menor nivel desde fines de junio. En tanto, el S&P 500 y el Nasdaq cayeron por quinto día consecutivo.
En el mercado de deuda, los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años sufrieron su mayor caída en siete años.
Tecnológicas, las más afectadas
Las firmas de tecnología, que obtienen una parte considerable de sus ingresos en China, fueron las más golpeadas. El sector bajó 1.7 por ciento, lastrado mayormente por los descensos de Apple, que perdió 2.1 por ciento, y de fabricantes de semiconductores.
El anuncio de los nuevos aranceles a China también presionó a los precios del petróleo en el mercado internacional, lo que exacerbó las bajas de Exxon Mobil y Chevron tras sus reportes de resultados trimestrales.
Con información de Peter Wells y Mamta Badkar en Nueva York.