El banco central de Irlanda impuso una multa de 5.9 millones de euros a Wells Fargo por fallas de cumplimiento “particularmente graves” en su operación en Dublín, la segunda multa más alta que impone el regulador irlandés.
El gobierno y los controles de Wells en su filial de Dublín, que atiende a clientes corporativos en toda la Unión Europea, eran tan inadecuados que la compañía “no detectó su propia falta de cumplimiento”, dijo el banco central en un comunicado.
Los incumplimientos regulatorios, que admitió el banco, incluyen fallas en los informes de capital y pruebas de liquidez, la falta de un consejo robusto y procesos de documentación internos débiles.
Las fallas reflejan una “mala cultura de cumplimiento en lo que se refiere a los reportes regulatorios de la institución financiera”, dijo Seána Cunningham, directora de cumplimiento del banco central.
La multa se produce cuando Wells aún batalla para contener las consecuencias de un escándalo de cuentas falsas en Estados Unidos, que surgió hace tres años.
En mayo, después de que el entonces director ejecutivo Tim Sloan se sintiera vituperado durante una comparecencia ante un comité del Congreso, la Oficina del Contralor de la Moneda emitió un comunicado diciendo que el regulador estaba “decepcionado” con los esfuerzos de Wells para mejorar su gobierno y los controles de riesgo.
Sloan renunció dos semanas después y pasó el liderazgo del banco de manera provisional a Allen Parker, un ex abogado de Wall Street.
Desde entonces el grupo es objeto de las críticas del director ejecutivo de JPMorgan, Jamie Dimon, quien lo calificó de “irresponsable” por no tener en fila un sucesor permanente para Sloan.
Warren Buffett, el mayor inversor de Wells, instó al banco a ver más allá de Wall Street para encontrar un sucesor que pueda hacer las paces con los reguladores.
La semana pasada, Wells anunció formalmente la creación de una “oficina de ejecución estratégica y operaciones” que se enfocará en mejorar el cumplimiento de la compañía y los procesos comerciales.
Parker describió la creación de la oficina como “un paso importante en el trabajo de Wells Fargo para cumplir con las expectativas de nuestros reguladores financieros”. La medida se informó en mayo pasado por primera vez en Financial Times.
La entidad ve un mal panorama
En abril, el banco redujo sus objetivos de utilidades para 2019, diciendo que la caída de las tasas va a comprimir sus ingresos netos por intereses. Sus acciones bajaron 14 por ciento en los últimos 12 meses. Wells dijo en un comunicado que tomó en serio sus obligaciones y que “estos eventos se referían a informes regulatorios y no afectaron a nuestros clientes”.
Instituto central da varios golpes
En mayo, el Banco Central de Irlanda asestó un golpe a Permanent TSB, uno de los tres bancos irlandeses con respaldo del gobierno de ese país, con una multa de alrededor de 21 millones de euros tras un escándalo de exceso de cargos; en tanto, durante la semana pasada impuso una multa de 1.6 millones de euros a JPMorgan por fallas regulatorias consideradas como graves.