La producción de maíz para alimento de ganado bovino y su almacenamiento en silos (lugar destinado a almacenar granos y forrajes), permitiría la autosuficiencia de los ganaderos en insumos.
El director de Innovación y Nuevos Negocios de Bayer México, José Antonio Tiburcio, dice que los ganaderos enfrentan los retos de falta de tecnificación para alimentar al ganado, dependencia de pastura de temporada y encarecimiento del zacate en sequías, ya que en condiciones normales, el costo del alimento representa 60 por ciento de los gastos de operación de los ganaderos mexicanos.
Frente a esta problemática, la empresa desarrolló el programa DKsilos en 2016, con el objetivo de ofrecer una alternativa de dieta para el ganado mediante el ensilaje de maíz (consiste en conservar los forrajes por medio de fermentaciones, que los mantienen en un estado muy semejante al que poseen cuando están frescos), y a los ganaderos, la posibilidad de incrementar sus ingresos y mejorar su calidad de vida, explica el directivo.
¿Qué tan importante es México para Bayer?
El país es muy relevante para Bayer por el tamaño de mercado, tenemos ocho plantas de las tres divisiones: la farmacéutica que es muy fuerte; la división de medicamentos de libre venta, como Aspirina y Redoxon; y la agrícola, que representa 50 por ciento del nuestro negocio y quizá en México y en el mundo es la que menos se conoce.
En las tres divisiones nuestro propósito es hacer ciencia para un medio mejor, en la salud para que se puedan curar las enfermedades y en la parte de agricultura es traer soluciones, desde semillas hasta productos biológicos y biotecnología, que ayuden a conservar los cultivos.
¿Cuál es la estrategia de la compañía para mejorar la alimentación de los animales?
El eje central del programa DKsilos es apoyar a los ganaderos de pequeña escala, con el objetivo de garantizar el suministro de alimento para su ganado durante la temporada de sequía, cuando no hay pasto disponible para los animales, y estos normalmente pierden peso y enferman.
Para lograrlo, se les abastece de semillas, capacitación y tecnología para que puedan cultivar el alimento del ganado y tengan mejores condiciones de almacenamiento en silos. Esta técnica permite conservar el alimento por más tiempo, permitiendo al productor aumentar el número de cabezas y reducir costos de alimentación.
¿Cuál es la importancia del ensilaje?
El ensilaje de maíz ayuda a los ganaderos a alimentar a los animales en tiempos de sequía. En nuestro país, el proceso ganadero se basa principalmente en el pastoreo, procedimiento funcional y eficiente hasta la temporada de sequía, que ocurre entre noviembre y abril de cada año. En ese periodo, el ganado puede perder hasta 90 kilos, lo que se traduce en una menor producción de leche y carne de menor calidad. Las vacas también son más propensas a enfermar y menos propensas a reproducirse, por lo que los ganaderos se enfrentan a grandes dificultades y gastos durante este periodo.
¿Qué beneficios ofrece el programa DKsilos a los ganaderos?
Un ganadero, que ya aprendió a hacer silos, va a estar mucho mejor preparado en tiempos de sequías, que con el cambio climático cada vez serán más severas.
Un estudio de la compañía 60 Decibels, demuestra con contundencia el impacto del programa, ya que gracias a él, 42 mil ganaderos lecheros, de ocho estados de la República y de Centroamérica, incrementaron considerablemente su producción de carne y leche; mejoraron la calidad y valor nutricional de estos productos y redujeron el costo de alimentación de sus animales en más de 60 por ciento, aumentando considerablemente sus ingresos.
Tenemos casos de pequeños ganaderos, que gracias al programa, se han convertido en productores regionales de leche a mayor escala. DKsilos los conectó a la industria, que ahora se beneficia de menores tiempos y costos de transporte y, por lo tanto, produce menos emisiones de carbono. Las comunidades locales también se beneficiaron de la expansión de las operaciones lecheras y la creación de empleo con este programa.
En cuanto a los ganaderos más avanzados del programa también están incorporando tecnología de punta para el monitoreo de sus animales. Mediante collares con sensores, que se les colocan a las vacas, es posible obtener datos de su nutrición, salud, fertilidad y alimentación, lo que les permite implementar acciones oportunas para asegurar su bienestar y la productividad.
él dice“El ensilado de maíz ayuda a los ganaderos
A alimentar a los animales en tiempos de sequía"
¿Cuáles son los retos que aún enfrentan los ganaderos en México?
La falta de tecnificación para alimentar al ganado, dependencia de pastura de temporada y encarecimiento del zacate en sequías. En condiciones normales, el costo del alimento representa 60 por ciento de los gastos de operación de los ganaderos. En el sur hay una ganadería extensiva, con un animal por hectárea y una alimentación a base de pasto. Esto es muy cómodo para el ganadero, pero no cuando hay sequía, ya que el ganadero compra pasto a 3.50 pesos por kilo, cuando en temporada regular es de 1.50 pesos.
Por ello, los ganaderos compran cantidades mínimas para alimentar a las vacas, que pierden hasta 90 kilos de peso en detrimento de su producción de leche, con una crianza más lenta y una menor rentabilidad. Al hacer el ensilado de maíz el costo es de 80 centavos
¿Qué impacto económico tiene el ensilado de maíz en el país?
La siembra de ensilado de maíz tuvo una tasa de crecimiento compuesto de 52 por ciento entre 2016 y 2022, pasando de 10 mil hectáreas a más de 120 mil en México. Desde 2016, la suma de ahorros de los ganaderos participantes del programa es de más de 550 millones de dólares (mdd), al utilizar el alimento producido localmente en lugar de comprar pacas de hierba. Además, se han generado más de 200 mdd en beneficios incrementales gracias a una producción de leche de mayor cantidad y calidad.
La producción y el almacenamiento del ensilado de maíz cuestan entre 50 y 75 por ciento menos que alimentar a los animales durante la estación seca con pacas de hierba. También tiene un mayor contenido nutricional, ya que la concentración de almidón en los granos de maíz proporciona más energía por kilogramo. Para los ganaderos, esto significa tener vacas más sanas, que producen leche de mejor calidad y más crías, a un coste significativamente menor.
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